Soy Janet, gastrónoma de profesión y de corazón. Amo la cocina desde que tengo memoria, gracias a mi mamá. La mayor parte de mi carrera la he pasado en cocina, ya sea en banquetes, restaurantes, hotel, además de dar clases. 

Durante la pandemia perdí mi trabajo y me autoempleé. Mi esposo es capitán de meseros en eventos y tiene su brigada de meseros. Hace mucho me dijo que debería trabajar con él, pero lo pensé por mucho tiempo ya que creí que el trato con la gente sería difícil. Pero el día que me decidí a hacerlo, me gustó mucho y lo he hecho muy bien. Uno no solo atiende a los comensales, platicas con ellos y hasta bromeas. Además siempre me ha gustado el trabajo en equipo. El trabajo en banquete o restaurante siempre es en equipo, cocina y servicio. 

Llevo menos de un año en el área de servicio y ya tengo algunos clientes, y los mismos me han recomendado con sus familiares y amigos. A veces aún estoy en cocina, pero el servicio es muy satisfactorio. 

En el día a día he hecho grandes amigos, que me van enseñando cómo ser mejor en mi trabajo.

En algunos lugares no aceptan meseras, pero gracias a los clientes que estoy haciendo, puedo llevar a varias amigas y compañeras que son excelentes en su trabajo. 

En algunos ámbitos es difícil desarrollarse siendo mujer, sin embargo, dando lo mejor de nosotras, nuestro trabajo es la mejor carta de recomendación.