¿Cómo afecta a nuestro país la realidad migratoria (lugar de procedencia, lugar de paso, lugar de llegada)?

Guatemala está atravesando una de las crisis migratorias más fuertes de los últimos tiempos, las causas son evidentes; la falta de oportunidades económicas, los altos índices de violencia y la pobreza, desigualdad y corrupción, falta de oportunidades para las juventudes, las personas que deciden migrar lo hacen en busca de una mejor calidad de vida, muchas veces las familias se hacen de deudas enormes para pagar el costo del viaje. El consejo nacional de atención al migrante mencionó que aproximadamente 300 guatemaltecos salen del país cada día rumbo hacia estados unidos.

¿Qué problemática nos encontramos en este tema en nuestro país?

Considero importante mencionar que el trayecto es sumamente peligroso, todo el viaje esta cundido del crimen organizado, ríos difíciles de cruzar y toda la vigilancia que hay en el camino, la falta de seguridad para los migrantes, son muchas las personas que dejan sus hogares como esa única opción de supervivencia, la mayoría se ven obligadas hacerlo.

¿Qué experiencia tenemos de atención a esta realidad?

El IGER como una institución educativa ha coordinador esfuerzos con la Red Jesuita con Migrantes en Guatemala para identificar a jóvenes y señoritas retornados para brindarles una oportunidad para continuar con su formación académica a través de una beca y así poder continuar estudiando.

La realidad migratoria en Venezuela es, principalmente, la de salida. Se calcula que siete millones de ciudadanas y ciudadanos han dejado el país para buscar un futuro mejor. Aunque hay causas políticas, la mayoría de las salidas tienen su causa en la mala situación económica con salarios bajísimos que lleva a renunciar a los puestos de trabajo para ir a buscar mejores sueldos en otro país. Colombia es el principal lugar de salida, ya sea como destino, ya como lugar de tránsito hacia el norte (a través de Panamá hacia los Estados Unidos), ya sea hacia el sur (Ecuador, Perú, Chile). Muchas veces no hay un plan migratorio, sino un ponerse en marcha pasando por diversos sitios a la espera de que en alguno de ellos se pueda vivir mejor. Eso hace que también los propios estados fronterizos con Colombia puedan ser lugar para detenerse.  Esto tiene consecuencias sociales: a) la salida de muchas personas jóvenes que dejan atrás familia y muchas veces a pequeños que quedan en manos de sus abuelos; b) el abandono de los mayores que quedan en el país con los más jóvenes de la familia en el exilio; c) muchos puestos de trabajo no tienen personal cualificado porque abandonan para salir del país.  Por otro lado, constatamos que muchas de las personas migrantes luego no consiguen en el país de destino situarse en su nivel formativo y profesional.

En nuestro país, el Paraguay.  la mayor cantidad de migrantes son de procedencia, es decir viajan a otros países en especial a la Argentina y en España y en menor cantidad a los E.E.U.U. También contamos mucho con la migración interna que poblaciones rurales y campesinas son desplazados en la periferia de las ciudades más desarrolladas.

También menor proporción recibimos algunos migrantes de otros países como venezolanos, bolivianos, coreanos entre otros.

Los que se desplazan a otros países pierden su identidad, su cultura, algunos forjan un mejor futuro para sus familias y otros de desintegra la familia.

Experiencia de atención a migrantes no tenemos como Fe y Alegría Paraguay.

España es hoy por hoy un país fundamentalmente receptor de migración aunque se de también cierto movimiento de profesionales hacia otros mercados laborales. Los orígenes son, fundamentalmente, América Latina, África (tanto norte como subsahariana) y otros vinculados a situaciones especiales (Siria, Ucrania). La primera dificultad es la dificultad del acceso, que pone a la población migrante en posiciones de peligro en los viajes y también de deuda al llegar. Como en Italia, la dificultad fundamental tiene que ver con la regularización y de ahí el resto: vivienda, salud, educación, empleo. Las dificultades de gestión del proceso migratorio hace nacer en parte de la población un fuerte sentimiento xenófobo donde se acentúan las dificultades de convivencia. 

Italia es, a la vez, país de inmigración y de paso. También se está dando un proceso migratorio a otros países de la Unión Europea. Como país de inmigración, la población migrante proveniente de América Latina o de África tiene dificultades para conseguir su regularización, lo que está en la raíz de otras problemáticas: acceso a los servicios sociales, la educación, la salud, el empleo, la vivienda. El idioma es una barrera que, en ocasiones, se hace insuperable para parte de la población que decide buscar otros destinos (fundamentalmente España por parte de los latinoamericanos). Observamos muchas situaciones familiares muy deterioradas.