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Love: from the pages of Pride and Prejudice.

Since Valentine's Day is soon approaching, the novel "Pride and Prejudice" has an important message to teach us about love. It is a classic that will never go unnoticed. Written by Jane Austen, we will follow the story of Elizabeth, the second daughter of a very peculiar family, who after a party, meets Mr. Darcy, a young heir. Both will play a game where one is prejudiced and the other is very proud. In this romantic story, Elizabeth Bennet is the main character: she is intelligent, empowered, lovely and kind. However, her sharp tongue and tendency to make snap judgments often lead her astray. Mr. Darcy is the son of a wealthy and well-established family and owner of the large Pemberley estate, he also has a tendency to judge too hastily and harshly, and his high birth and wealth make him too proud and too self-conscious of his social status. 

That's why these characters learn to overcome all obstacles throughout the story, including their own personal failings, to find romantic happiness. Elizabeth had to leave behind her prejudices and Mr. Darcy his pride, for the two to end up falling in love.


This story shows us that love is real and meaningful and, at the same time, a challenge that can teach us a lot. This novel isn't about love at first sight or a fairy tale narration, actually, it has a deep meaning. Elizabeth and Mr. Darcy help us understand that we need to leave behind all the things that don't let us love others fully and deliberately, whether it be our couple, family or friends. For this reason, on this day that is approaching, think for a moment about the things that as a person you should let go of in order to love people, especially those who make you happy, from the bottom of your heart.


Sofía Valle Hoyos, 11°C.

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¿Qué es el amor?

"En San Valentín diría también el aura adiós".

Hay una frase muy popular de Los sufrimientos del joven Werther que señala, de un modo precioso y poco grandilocuente, una idea del amor muy celebrada precisamente en fechas como San Valentín, ese pasional amor irrefrenable que domina y embriaga incluso a la razón: “Yo también tengo a mi corazoncito como un niño enfermo: le concedo todos sus deseos” (p. 12). Este niño recibe todos sus antojos sin temer consecuencias porque hay un bien mayor que lo protege, el amor mismo.

Por ello, cada entusiasmo, cada alegría, cada encuentro con el ser amado es un beneficioso paliativo, una elusión de su enfermedad. Sin embargo, cuando este amor se torna memoria y es el recuerdo el que entrega ese entusiasmo, alegría y encuentro, entonces, esa memoria recorre horadando los rincones inexplorados, y por eso mismo indefensos, de aquel corazoncito enfermo. Sin el paliativo de la presencia del ser amado, ese corazón es apenas una pared baleada. Y para resanarla solo queda el sedimento de una tristeza cada vez más pesada que se empoza en su centro; pero quien ama, pleno de rencores que no entiende, no sabe cómo usarla para llenar sus huecos. Así, otra vez, solo queda la estólida ilusión de que, en memoria precisamente de aquello todavía hiriente por su rebosante alegría, de esa felicidad descubierta en la complicidad de encontrarse y la belleza de los juramentos que no se cumplieron, el ser aún amado entregue, al menos, la final aurora atroz para la merecida despedida.

Héctor Munévar (Departamento de Español).

~Amar~

Mariposas revoloteando por todo nuestro abdomen.

Esa manera en la que el corazón retumba al ritmo del compás.

Son los ojos que transmiten un brillo

 enceguecedor, 

Son el dolor de las mejillas al sonreír de más.


mo nos volvemos tan vulnerables hacia alguien,

entregándole aquello que cuidamos con tanto valor.

De un extraño que conocimos un día, 

de repente ¿cómo sentimos un familiar calor?.


Esas mejillas rojas a punto de explotar

Y esas miradas se atraviesan para conocernos.

Es esa forma de sentirnos,

es esa forma de estremecernos

Luciana Vides 9°B


Cómo te explico que no es algo fácil.

El término de almas gemelas nos lo confabularon

¿Cómo es estar seguro de esto?

¿Cómo es que dos polos opuestos se enamoraron?


Ya sea que del amor al odio haya un paso

O de amigos de la infancia nazca esta emoción. 

El amor es más grande que un sentimiento. 

El amor es una difícil y desesperada decisión.


Vivimos para amar y ser amados.

Para algunos es gozo y para otros, dolor.

Unos no lo buscan, sino que viene solo

Y otros sufren al ver desvanecerse su color.


A aquellos que están enamorados y lo viven

O a aquellos que sufren con no poder gritarlo 

a los 4 vientos

Feliz día de san Valentín 

Y también para los solteros carentes de sufrimientos.

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Infografía: Equipo de Bienestar.