Enseñanza y Reparación

Eucarística

Oración para todos los días


Oración Eucarística pidiendo irradiación del Amor Divino

Pbro. Padre Juan Martín Osorio

Colombia

Enseñanza Eucarística

Vol. 3-66  Mayo 1, 1900



"La Cruz y la Eucaristía  se alternan juntas, y una obra más potentemente que la otra"




Frutos de la cruz


(1) Habiendo recibido la comunión, mi dulce Jesús se ha hecho ver todo afabilidad, y como parecía que el confesor ponía la intención de la crucifixión, mi naturaleza sentía casi repugnancia de someterse. Entonces mi dulce Jesús para animarme me ha dicho:

(2) “Hija mía, si la Eucaristía es garantía de la futura gloria, la cruz es desembolso para comprarla. 

Si la Eucaristía es semilla que impide la corrupción, y es como esas hierbas aromáticas, con las que ungiéndose los cadáveres no se corrompen, y dona la inmortalidad al alma y al cuerpo, la cruz la embellece y es tan potente, que si hay deudas contraídas ella se hace fiadora y con mayor seguridad hace que se le restituya la escritura de la deuda contraída, y después de que ha satisfecho todo adeudo, con ello forma al alma el trono más deslumbrante en la futura gloria. 

¡Ah! sí, la cruz y la Eucaristía se alternan juntas, y una obra más potentemente que la otra”.


(3) Después ha agregado: “La cruz es mi lecho florido, no porque no sufriera dolores atroces, sino porque por medio de la cruz daba a luz a tantas almas a la gracia, veía brotar tantas bellas flores que producían tantos frutos celestiales, así que viendo tanto bien, tenía para delicia mía aquel lecho de dolor y me deleitaba de la cruz y del sufrir. También tú hija mía, toma como delicias las penas y deléitate de estarte crucificada en mi cruz. No, no quiero que temas el sufrir, como si quisieras obrar como holgazana, ánimo, obra con animosidad y exponte por ti misma al sufrir”.

(4) Mientras esto decía, veía a mi buen ángel que estaba preparado para crucificarme, y yo por mí misma he extendido los brazos, y el ángel me crucificaba. ¡Oh, cómo gozaba el buen Jesús de mi sufrir, y cómo estaba yo contenta, porque podía dar gusto a Jesús siendo un alma tan miserable! Me parecía que fuera un gran honor para mí el sufrir por amor suyo.

Reparación Eucarística

Libro de Cielo y Hora de la Pasión


Ofrecemos para reparar 

Una enseñanza del Libro de Cielo para profundizar y reparar la falta cometida; y una Hora de la Pasión con la que Jesús Repara la gravedad de la falta que cometemos en nuestro Ministerio de vida, como resultado de no conocer y no amar a Dios. 

Libro de Cielo


"La Cruz y la Eucaristía se alternan juntas"




AUDIO



"No sólo empleé todo el curso de mi vida mortal en continuos sacrificios, hasta morir desangrado sobre una cruz, sino que me dejé como víctima perenne en el sacramento de la Eucaristía"



Vol. 3-84  Junio 18, 1900


Todo lo creado nos enseña el amor de Dios, el cuerpo llagado de Jesús, el amor del prójimo.

(1) Jesús sigue sin venir, y yo trataba de ocuparme en considerar el misterio de la flagelación. Mientras esto hacía he visto al bendito Jesús todo llagado y chorreando sangre y me ha dicho:

(2) “Hija mía, el cielo con todo lo creado te enseña el amor de Dios; mi cuerpo llagado te enseña el amor del prójimo, tanto, que mi Humanidad unida a mi Divinidad, de dos naturalezas hice una sola y las volví inseparables, porque no sólo satisfice a la divina justicia, sino realicé la salvación de los hombres. 

Y para hacer que todos asumieran esta obligación de amar a Dios y al prójimo, no sólo hice de esto una sola obligación, sino que llegué a hacer de esta obligación un precepto divino. 

Así que mis llagas y mi sangre son tantas lenguas que enseñan a cada cual el modo de amarse, y la obligación que todos tienen de poner atención a la salvación de los demás”.

(3) Después, tomando un aspecto más afligido ha agregado:

(4) “Qué despiadado tirano es para mí el amor, porque no sólo empleé todo el curso de mi vida mortal en continuos sacrificios, hasta morir desangrado sobre una cruz, sino que me dejé como víctima perenne en el sacramento de la Eucaristía. Y no sólo esto, sino que a todos mis miembros predilectos los tengo víctimas vivientes en continuos sufrimientos, empeñados en la salvación de los hombres, como entre tantos te elegí a ti para tenerte sacrificada por amor mío y por los hombres. ¡Ah sí! Mi corazón no encuentra descanso ni reposo si no encuentra al hombre, y el hombre, ¿cómo me corresponde? ¡Con ingratitudes enormísimas!”

(5) Dicho esto ha desaparecido.

Reparación Eucarística

Hora de la Pasión

"La finalidad de estas Horas de la Pasión... es la de la Reparación: uniéndonos a Jesús en cada uno de los diferentes pasos de su pasión y con su misma Voluntad Divina, hacer una digna reparación por cada una de las diferentes ofensas que recibe, haciendo todo lo que las criaturas le deben".

Luisa Piccarreta

Del Libro:

Las Horas de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo


Hora 5 

De las 9 a las 10 pm

La Primera Hora de Agonía en el Huerto de Getsemaní


“ « Hijo mío, ¿quieres saber quién es el que me atormenta mucho más que los mismos verdugos? Es más, ¡ellos no harán nada en comparación con lo que ahora sufro!

Es el Amor Eterno, que queriendo tener la supremacía sobre todo, me está haciendo sufrir todo junto y hasta en lo más íntimo de mi ser, lo que los verdugos me harán sufrir poco a poco. ¡Ah, hijo mío! Es el amor que prevalece totalmente sobre mí y en mí: el amor es para mí clavo, flagelo y corona de espinas; el amor es para mí todo; el amor es mi pasión perenne, mientras que la de los hombres será temporal... Hijo mío, entra en mi Corazón, ven y piérdete en los abismos de mi amor:

solamente en mi amor llegarás a comprender cuánto he sufrido y cuánto te he amado, y aprenderás a amarme y a sufrir sólo por amor ». “


Web: Texto completo de la Hora 5:

La Primera Hora de Agonía

Reparemos junto a Jesús, en su Humanidad Divina. Con sus mismos actos, con su misma Palabra, con sus Mismas Reparaciones,...

Para que hagamos, reparemos y vivamos en Jesús y en su Divina Voluntad.