Robinia pseudoacacia 

La falsa acacia (Robinia pseudoacacia), es una especie del género Robinia en la familia Fabaceae. Es nativa del este de Estados Unidos, aunque se ha introducido en otros países. Es, con Sophora japonica y Gleditsia triacanthos, uno de las tres «falsas acacias» plantadas en tantas ciudades del mundo para adornar calles y parques.

Árbol de follaje caducifolio, de unos 25 m de altura con un tronco de diámetro inferior al metro -excepcionalmente hasta 50 m de altura y 16 dm de diámetro en muy viejos individuos- con una espesa corteza negruzca profundamente fisurada. 

Las hojas, con peciolo y raquis con 5 costillas agudas, tienen 10-25 cm de largo con 9-19 folíolos de 2-5 por 1,5-3 cm generalmente mucronados, y que llevan usualmente un par de acúleos -que se desarrollan después de la caída de las estípulas lineales originales, tempranamente caedizas- en la base y de hasta 2 cm en individuos jóvenes y más cortos en los adultos; se cultivan variedades sin espinas y con copa redondeada (Robinia pseudoacacia umbraculifera). 

Las flores son muy fragantes, blancas y están agrupadas en racimos péndulos de 8-20 cm y dichas flores tienen un cáliz acampanado, giboso, peludo con 5 dientes. La corola es imperfectamente papilionácea con un androceo de 10 estambres , 9 soldados en tubo y uno libre en la base. El ovario es súpero con múltiples óvulos. 

El fruto es una legumbre muy comprimida de 4-12 cm de largo y 1-1,5 cm de ancho, de color canela y de superficie con reticulación poligonal irregular, dehiscente por 2 valvas, con 4-10 semillas de contorno arriñonado, de color naranja oscuro/pardo con manchas irregulares negruzcas, y con funículo corto de implantación disimétrica; están dispuestas transversalmente en una sola fila. Dicha legumbre madura al final del otoño y se queda en el árbol hasta la primavera siguiente.  

En la Península su uso más habitual es como ornamental, por su rápido crecimiento y vistosa floración. Sus flores son a veces consumidas por los niños como golosina, a la que suele llamarse ‘pan y quesillo’.

En sus lugares de origen la madera se usó en pequeñas piezas como mangos y, donde era muy abundante, en estructuras de edificios. Por otro lado, sus semillas son tóxicas y hay que tener cuidado de que no sean consumidas por el ganado.

Una especie con la que a menudo se confunde es con la acacia del Japón (Sophora japonica L.), oriunda del este de Asia, que se diferencia por carecer de espinas, tener las hojuelas de punta aguda y las legumbres globosas y con estrechamientos.

El nombre de Robinia está dedicado al jardinero francés Jean Robin, que fue el primero en cultivar este árbol en Europa; el epíteto específico pseudoacacia quiere decir ‘falsa acacia’, que es el que le da el nombre común. 

Localizaciones

Total :  5

Parque Santuyano ( 4 ejemplares )

Parque Campillín (1 ejemplar)