Platanus x hispanica

Platanus × hispanica, conocido también como Platanus × acerifolia , Plátano híbrido y plátano de sombra, es un árbol de imponente porte que alcanza los 55 m de alto, perteneciente a la familia de las platanáceas. Normalmente se considera un híbrido de Platanus orientalis y Platanus occidentalis, aunque hay expertos que opinan que puede tratarse de un cultivar de P. orientalis.

Es común en los parques y jardines de todas las ciudades de las zonas templadas del mundo.

Según una placa colocada en el parque de Cordellas, en Cerdañola del Vallés (Barcelona), es un árbol de muy larga vida: puede vivir hasta 500 años.

Es un árbol monoico, caducifolio de ramas abiertas y amplia copa. Su corteza, de color ceniciento o verdoso, castaño en los troncos viejos, se desprende en placas escamosas que dejan al descubierto manchas irregulares amarillentas o blanquecinas de la corteza interna. 

Las ramitas son glabrescentes, el indumento de pelos estrellados, y los brotes densamente tomentosos, mientras las yemas son de forma ovoideo-cónica y cubiertas por una única escama. 

Las hojas, similares en forma a las del arce, tienen unas dimensiones de 12-22 cm de largo por 12-30 cm de ancho, son tri/penta-palmatífidas, con los lóbulos anchamente ovado-triangulares, enteros o sinuado-dentados, de truncadas a abiertamente cordadas en la base, densamente tomentoso-flocosas de jóvenes –luego glabrescentes–, verde vivo en el haz y más claras en el envés.

Las inflorescencias, masculinas y femeninas, se agrupan generalmente por pares, cada sexo sobre un mismo y largo pedúnculo, y aparecen al mismo tiempo que las hojas. Las inflorescencias femeninas son globulares y colgantes, de 2-3 cm de diámetro, y agrupan, insertadas alrededor de un receptáculo subesférico centimétrico de superficie tuberculada e irregularmente tabicada, centenares de flores muy pequeñas con sépalos escuamiformes, más o menos espatulados, más cortos que los pétalos que son escariosos y agudos, y los carpelos, bi-ovulado, pero uno de ellos casi siempre aborta, están envueltos en la base por un penacho de pelos largos. 

Las flores masculinas se agrupan también sobre un receptáculo globular-ovoideo/arriñonado centimétrico, algo comprimido y de superficie más claramente tabicada poligonalmente que los receptáculos de las inflorescencias femeninas, y cubiertos por un denso indumento de largos y finos pelos sedosos pluricelulares implantados en dichos tabiques. Tienen 4 estambres con filamentos cortos y anteras alargadas y son tempranamente caducas. Las infrutescencias, colgantes, de 25-30 mm de diámetro son poliantocarpos globulares/esféricos, que agrupan numerosos aquenios claviformes con estilo persistente y rodeados de un penacho de pelos erectos más o menos adpresos, el conjunto de un color pardo claro/canela y que, generalmente, se desprenden al año siguiente de la maduración. 

Las semillas son pequeñas, con testa delgada, de endospermo escaso y con un embrión de 2 cotiledones lineares, frecuentemente desiguales

Su madera es dura, semejante a la del haya, y en su zona de origen se usa para mangos, herramientas, chapas y tableros.

Además de la cita inicial del novelista francés Julio Verne, estos otros apuntes literarios —ambos de escritores barceloneses— incluyen al plátano de sombra en las descripciones de sus novelas. Carlos Ruiz Zafón, en La sombra del viento, nos habla de los plátanos de paseo de Barcelona: «La fachada, salpicada de ventanales en forma de puñal, recortaba los perfiles de un palacio gótico de ladrillo rojo, suspendido de arcos y torreones que asomaban sobre las copas de un platanar en aristas catedralicias». Eduardo Mendoza, en Mauricio o las elecciones primarias, describe los plátanos de un pueblecito del Pirineo aragonés: «La casa era pequeña, con un jardín húmedo y umbrío que la separaba de una carretera secundaria bordeada de plátanos enormes». Mario Camus, en El extranjero, escribe: «Pero esperé en el patio, debajo de un plátano».

Esta planta es causante de alergias y molestias para muchas personas. El polen del plátano es altamente alergógeno. Los granos que flotan en el ambiente en primavera muchas veces se quedan entre los pelillos que a modo de tomento tienen las hojas juveniles y crean un efecto sinérgico de afecciones respiratorias y cutáneas. Pero además, los frutos deshechos, y que en muchos lugares sirven de juego para los niños, se conocen con el nombre vulgar de ‘pica-pica’ por su capacidad de irritar la piel.

Contrariamente a lo que pudiera parecer, Platanus no se refiere al fruto de la platanera o banana (Gen. Musa L.). Era el nombre que le daban los romanos al plátano silvestre de Europa (Platanus orientalis L.), y procede de la voz griega platýs, que significa ‘ancho’, por la extensión de sus hojas. El epíteto específico hispanica alude al origen de unas variedades procedentes de España. Aunque hemos seguido el criterio de Flora iberica, Platanus hispanica es un nombre controvertido y muchos autores defienden que debería llamarse Platanus orientalis L. var. acerifolia Aiton, es decir, ‘plátano del este de hojas de arce’. 

corteza

hoja

flores masculina y femenina

receptáculos infloresencias

Localizaciones:

Total : 197

Plaza San Javier (16 ejemplares )

Jardines HUCA ( 90 ejemplares )

Plaza del Coceyin ( 33 ejemplares)

c/ Río Sella ( 15 ejemplares )

Parque Miguel Indurain ( 26 ejejmplares )

c/ Joaquin Costa ( 10 ejemplares )

c/ Doctor Melquiades Cabal ( 1 ejemplar )

c/ Molinos de Sinicio ( 6 ejemplares )