Peonza holandesa

Este tipo de juego con peonzas se le conoce como "Toupie Hollandaise" y también como "Toptafel", “Toupie des Indes” o “Jeu du Roy”.

Se cree que tiene su origen en el siglo XVII, pero su máximo apogeo fue con mesas de mayor tamaño en los siglos XIX y XX. Se trataba de un juego aristocrático que se jugaba en una mesa preparada para ello. En este juego se utilizaban peonzas para intentar derribar pequeñas clavijas/bolos. 

Los orígenes de la peonza holandesa son bastante vagos. Inventado sin duda por los marineros de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales en el siglo XVII. En efecto, la posición de los bolos sobre la mesa sería: un rey en el centro del juego, dos lanceros, dos alguaciles y 7 guardias armados. Una de las hipótesis sobre tal posición de los bolos, con tal simbolismo, se referiría sin duda a la guerra que enfrentó a las Provincias Unidas con España, conflicto denominado “revuelta de los Países Bajos” que tuvo lugar a partir de 1568. hasta 1648. Así, para ocuparse de un viaje muy largo (unos 20 meses), los marineros de la Compañía que partieron a buscar productos a la India, habrían inventado este juego, en el que la peonza representaba a los holandeses derribando a los españoles.

Sin duda, fue durante los siglos XIX y XX cuando la peonza holandesa alcanzó su apogeo. Presente al principio en su forma inicial en los estaminets (tabernas) de los Países Bajos, Bélgica y el norte de Francia, se extendió a las casas burguesas en diversas formas más elaboradas y ya no representa más que una simple ruta cuyo objetivo es derribar tantos bolos como sea posible

Los principales fabricantes de estos juegos de salón del siglo XIX fueron Lebon fabricante desde 1771 en París en101 Avenue Montaigne (aparece en 1880 en el Almanaque del Comercio), su negocio fue adquirido sucesivamente por Chevrot (85, 101 o 103 de la  Avenue de Montaigne en París) y por La Corderie Centrale (Boucley, Thomas, Hardouin, Bardou, Clerc, et cie) en 12 boulevard de Sébastopol (aparece en 1897 en el directorio oficial de juguetes y juegos de bazar, baratijas, artículos de París). También fueron afamados fabricantes Auburtin en el 80 boulevard de Belleville de Paris y Victor Terchitzky fabricante de juegos de jardín y de salón en el 85 de la Avenue Montaigne de París (tenía una sala de juegos en el jardín Mabille en 1859).

En el siglo XIX, la peonza holandesa se exportó a Inglaterra y Estados Unidos, donde se encuentra con el nombre de "Devil among the tailors” (“El diablo entre los sastres ”).

Algunas fuentes sugieren que el juego "Devil among the tailors” lleva el nombre de un motín ocurrido en 1805, cuando cientos de sastres protestaron contra la representación de una obra que se burlaba de su profesión  (“The Tailors: A Tragedy for Warm Weather“). Los disturbios parecieron salirse de control, por lo que llamaron a las tropas que se acercaron a los manifestantes de una manera que se asemejaba a una bola de bolos atravesando bolos. Sin embargo, no es probable que los disturbios hayan dado nombre al juego. Joseph Strutt describe el juego en su libro  “Sports and Pastimes of the English people” (“Deportes y pasatiempos del pueblo inglés”), publicado en 1801 (cuatro años antes de los disturbios), y le da el nombre de "Devil among the tailors”.

Quizá el nombre se deba a que la profesión de sastre fue a menudo objeto de burla en el siglo XVIII, ya que la sastrería se consideraba "poco masculina" o "trabajo de mujeres". Además, se consideraba que el propio sastre era una persona ávida de dinero y sus clientes, que muchas veces solo querían lucirse en sociedad, estaban a menudo endeudados con los sastres, y les desagradaba enormemente cuando un sastre les enviaba cartas de reclamación. Desafortunadamente, en esta época había fuertes prejuicios contra los extranjeros, de modo que el prejuicio contra los sastres también se vio alimentado por la circunstancia de que muchos de ellos eran franceses o judíos. Por lo tanto, es posible que el nombre del juego sea un feo desaire a una profesión despreciada. Otro nombre prejuicioso para el juego fue “Devil amongst the tinkers” (“El diablo entre los caldereros”). Mucho más inofensivo eran los nombres del juego en Francia, “Table à toupie” ("Mesa de peonza") o “Jeu de Roi” (Juego del Rey).

La peonza holandesa se juega con una peonza, una mesa y bolos. La mesa es de madera rectangular y dividida habitualmente en tres compartimentos (salas) por galerías metálicas perforadas por puentes por los que pasa la peonza de un compartimento a otro. Cada compartimento está provisto de pequeños puentes o arcos, algunos solos, otros cruzados, e incluso debajo de alguno de ellos se coloca una pequeña campana. Finalmente, se colocan bolos entre cada arco.

La peonza se lanza desde una de las esquinas de la mesa, dispuesta al efecto. Entra primero en el primer compartimento, donde pasa bajo los arcos, choca contra los pilares, rebota, puede que derribe los bolos; luego entra en los demás compartimentos, donde causa los mismos estragos si tiene suficiente fuerza de giro. Cuando la peonza muere, contamos los bolos volcados; los del primer compartimento valen 1 punto; los del segundo 2, y los de los tercero 3. A veces  los puntos no dependen de donde esté situado el bolo sino que están escritos con un número (que incluso puede ser negativo.. El jugador con más puntos es el ganador.