En un pueblino de Extremadura se encontraba un rey enfermo, para el que su única esperanza de curación era hallar la “Flor del Lililón”, una planta muy difícil de conseguir. Este, desesperado, recurre a sus hijos para que vayan en busca de la ansiada flor y promete nombrar su heredero a aquel que la encuentre. Esto despierta la codicia de sus dos hijos mayores, que no dudan en actuar vilmente contra su hermano pequeño, quien únicamente busca la curación de su padre. El hallazgo de un pastor hace que se haga justicia con el pobre Pedrito.
Se encontraba gravemente enfermo de un mal para el que ni médicos ni cirujanos encontraban cura. Envía a sus tres hijos a la Sierra de Tormantos en busca de la “Flor del Lililón”, que es su única esperanza de salvación. Promete nombrar heredero al que la encuentre. Imparte justicia ante los hechos.
Toca la flauta que le traen los vecinos y sufre la pérdida de su hijo menor, Pedrito, de manos de sus propios hermanos.
Vecina del pueblo, conocedora de multitud de plantas curativas, que recomienda la “Flor del Lililón” para la cura del rey.
Se ve cegado por la ambición de convertirse en heredero del reino, llegando incluso a acabar con la vida de Pedrito, su hermano pequeño.
Al igual que su hermano mayor, es ambicioso y no tiene reparo en acabar con la vida de su hermano pequeño, Pedrito, para llegar a ser heredero de su padre.
Es el más pequeño de los tres hermanos. Su único objetivo es encontrar la “Flor del Lililón” para salvar a su padre.
Personaje que encuentra la flauta en el cañaveral en el que estaba enterrado Pedrito. Al tocarla y escuchar la voz del niño, decide llevarla al pueblo y contar lo sucedido.
Toca la flauta encontrada por el pastor en el cañaveral y decide, junto al resto de vecinos que se encontraban en la posada, informar al rey y la reina de lo sucedido.
Acuden a contarle a los reyes lo sucedido con la flauta y ayudan a que se haga justicia con Pedrito.