La Mujer Y El Uso Del Velo

En muchas congregaciones tienen por costumbre el uso del velo o manto en la cabeza de sus feligresas mientras estas se encuentran dentro del templo, pero en otras iglesias por el contrario no lo usan e incluso algunas hermanas en Cristo tienen cortes de pelo muy cortos llegándose a rapar el cabello de forma similar al corte que usan los militares.

La costumbre de usar el velo se fundamenta en una de las cartas Paulinas, específicamente en I De Corintios capitulo 11, el cual estudiaremos a continuación basándonos en el texto completo para obtener así una visión integra y objetiva del mismo ya que aunque parece un asunto trivial y de poca importancia les puedo asegurar que una simple tilde presente en el texto bíblico reviste mas importancia que todas las bibliotecas existentes en el mundo, ademas de que este tema en particular a sido debatido durante siglos por exegetas y hermanos de muchas y diversas congregaciones.

I De Corintios

Capítulo 11

11:1 Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo.

11:2 Os alabo, hermanos, porque en todo os acordáis de mí, y retenéis las instrucciones tal como os las entregué.

11:3 Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.

11:4 Todo varón que ora o profetiza con la cabeza cubierta, afrenta su cabeza.

11:5 Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta, afrenta su cabeza; porque lo mismo es que si se hubiese rapado.

11:6 Porque si la mujer no se cubre, que se corte también el cabello; y si le es vergonzoso a la mujer cortarse el cabello o raparse, que se cubra.

11:7 Porque el varón no debe cubrirse la cabeza, pues él es imagen y gloria de Dios; pero la mujer es gloria del varón.

11:8 Porque el varón no procede de la mujer, sino la mujer del varón,

11:9 y tampoco el varón fue creado por causa de la mujer, sino la mujer por causa del varón.

11:10 Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por causa de los ángeles.

11:11 Pero en el Señor, ni el varón es sin la mujer, ni la mujer sin el varón;

11:12 porque así como la mujer procede del varón, también el varón nace de la mujer; pero todo procede de Dios.

11:13 Juzgad vosotros mismos: ¿Es propio que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza?

11:14 La naturaleza misma ¿no os enseña que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello?

11:15 Por el contrario, a la mujer dejarse crecer el cabello le es honroso; porque en lugar de velo le es dado el cabello.

11:16 Con todo eso, si alguno quiere ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios.

El lector analítico puede apreciar que el texto anterior es complejo y su análisis exegético complicado (de no ser así, todas las hermanas en las diversas congregaciones usarían el velo o no lo usarían). Aunque si leemos atentamente y con mas detenimiento, nos percataremos de que el Apóstol Pablo exhorta a las mujeres a que cubran sus cabezas, y en ningún momento les dice que se cubran el cabello en si ya que el cabello es el velo natural de la mujer como ensena el mismo texto y esta la forma en que el apóstol concluye su argumento para dar un ultimo veredicto al respecto ya que aunque los versos 5 y 8 claramente indican que cuando la mujer ejerce algún ministerio para el Señor en la congregación, la situación cambia y el Apóstol exhorta a que las mujeres se cubran el cabello no rapado con el velo a causa de la autoridad jerárquica que le a sido otorgada al hombre por parte de Dios sobre la mujer, por lo que considero que la argumentación lógica del apóstol Pablo se divide en dos partes:

La primera es la exhortación del Apóstol a que las mujeres se cubran la cabeza, independientemente de la existencia del velo natural (El cabello), I de Corintios 11: 5-6, una forma de redundancia o énfasis en la necesidad de usar un manto ademas del cabello siempre y cuando se encuentren ministrando a la congregación. Y la segunda parte, es la apologética que hace la naturaleza misma del CABELLO otorgado a las mujeres, mostrando la forma en que la creación a provisto de un velo natural la cabeza de las mujeres, I Corintios 11: 13-14.

Este es el punto de vista del autor de esta obra, al igual que el de algunas congregaciones evangélicas como La Asamblea De Hermanos y El Ministerio Cristo Elim por citar algunos ejemplos. Han podido observar que en este breve escrito omito el análisis cultural e histórico del texto, considerando que la presente exhortación es para el Cuerpo de Cristo y no tiene limitaciones espacio temporales para su aplicación y observación.

Analicen y estudien el texto bíblico suministrado y en oración encuentren sus conclusiones en unidad con la doctrina de su comunidad eclesiástica y la dirección del Espíritu Santo.

Luis E. Padilla Cury

padillacury@gmail.com