La distinta participación del sujeto en la acción del verbo es la que establece la diferencia entre las voces activa y media:
en la voz activa, el sujeto es simple agente de la acción;
en la voz media, el sujeto es agente, pero la acción, además, repercute de nuevo sobre él (algo parecido al uso reflexivo o al de interés.
Por el contrario, en la voz pasiva el sujeto se desvincula de la acción verbal y se convierte en paciente, en receptor de la misma. Con un verbo pasivo la acción descansa sobre otro elemento de la oración: el complemento agente. El complemento agente se construye en latín en ablativo. La preposición a (ab ante vocal) precede al ablativo si se trata de una persona o cosa personificada; si se trata de cosa, el ablativo no lleva preposición:Antiochus a Cornelio Scipione vinceturAntíoco será vencido por Cornelio Escipiónclassis tempestate deleta estla flota fue destruida por la tempestad