TRABAJANDO EN LÍNEA
Una de las posibilidades que tenemos para usar el programa es trabajar en Internet (http://scratch.mit.edu). Al abrir la página tenemos la pantalla siguiente:
Lo primero que haremos es abrir una cuenta. Pulsa en Únete a Scratch (cuando ya te hayas creado una cuenta habrá que pulsar en la otra opción, en Ingresar). En el proceso de creación de la cuenta se abrirán tres ventanas una tras otra, en las que habrá que rellenar las casillas de datos:
No recomiendo poner datos reales más que en la dirección de correo, por si olvidamos la contraseña o para recibir notificaciones importantes. Además, recibiremos un correo electrónico con instrucciones para confirmar que estamos interesados en tener la cuenta de Scratch, y ser miembros de pleno derecho.
Al acabar todo el proceso aparecerá una pantalla de bienvenida, en la que tenemos tres manuales de aprendizaje muy bien hechos (siempre podrás volver a verlos pulsando en Ayuda):
Arriba a la derecha aparecen un sobre (nos indicará si tenemos algún mensaje), un rectángulo con una S (para ir a nuestro escritorio personal, llamado "Mis cosas") y un botón con el nombre de usuario que hayamos elegido. Al pulsar sobre el triángulo que hay al lado del nombre nos aparecen las opciones para cambiar nuestros datos, elegir el idioma y para salir:
Cuando entramos en Scratch tenemos la pantalla de bienvenida desde la que podemos acceder a "Mis cosas" (como ya hemos visto, el rectángulo con la S está presente siempre, así que en cualquier momento podremos pulsarlo):
Se abre esta nueva ventana, que es el escritorio en el que aparecen los programas que vayamos creando:
Para crear un programa podemos pulsar en Crear o bien en el botón + Nuevo Proyecto,
TRABAJANDO LOCALMENTE
La segunda posibilidad es trabajar con Scratch en el ordenador, y en este enlace tienes las instrucciones para descargarlo e instalarlo.
EL ENTORNO DE SCRATCH 2.0
Con cualquiera de las dos posibilidades, en la pantalla de programación se distinguen varias zonas:
La zona A es el escenario, donde podremos ver cómo funciona el programa.
La zona B es el espacio para crear el programa o área de trabajo.
La zona C es la biblioteca de bloques, con las órdenes que podremos usar.
Cuando hayamos creado algo, le pondremos un nombre, lo guardaremos y lo compartiremos:
Aunque Scratch almacena de vez en cuando, ya tenemos experiencia con los ordenadores como para saber que mientras estemos trabajando, es conveniente pulsar en guardar con frecuencia para evitar perder lo que llevemos hecho, ¿no es cierto?
En la opción de trabajo en Internet, además de crear trabajos desde cero, tenemos la opción de editar trabajos de otros usuarios y modificarlos. Esto se hace desde la pantalla inicial, pulsando en Explorar:
Al elegir un proyecto existente, podremos leer las instrucciones y ver cómo funciona (normalmente hay que pulsar en la bandera verde), pero también podremos analizar el programa pulsando en el botón Ver dentro.
Una vez abierto podremos editarlo y modificarlo pulsando en el botón Reinventar, con lo cual se creará una copia en nuestro escritorio.
Por hoy ya tenemos bastante. Dedicaremos el resto de la sesión a explorar programas creados por otros usuarios.