Una de las características propias del texto oral es que combina el lenguaje verbal con el lenguaje no verbal. Normalmente los gestos y expresiones faciales y la postura corporal refuerzan el mensaje que se transmite, pero cuidado, también pueden contradecirlo. Por eso oradores, políticos y otros profesionales suelen emplear técnicas para manejar el lenguaje no verbal.
Hay ciertos aspectos corporales que, muy a nuestro pesar en ocasiones, transmiten información:
Contacto visual prolongado: Mirar a los ojos de una persona durante un largo periodo de tiempo sin pestañear puede significar que se está mintiendo.
Mirar hacia los lados: Es una acción que puede tener un significado negativo, ya que en el lenguaje no verbal significa aburrimiento y que buscas vías de escape para distraerte.
Tocarse la nariz: Otro de los grandes conocidos en el lenguaje corporal. El principal significado es que la persona que realiza el gesto está mintiendo, pero también puede significar que la persona está enfadada o molesta.
Sonrisas falsas: Una sonrisa verdadera es aquella en la que te salen arrugas en las zonas cercanas a los ojos. Por esto las sonrisas falsas son las que no tienen esas arrugas.
Cabeza alta y barbilla hacia adelante: Cuando una persona realiza este gesto, se lee en comunicación no verbal como un signo que expresa agresividad y poder.
Tocarse la oreja: En muchas ocasiones este gesto significa el deseo de bloquear o no escuchar las palabras que se están oyendo. Pero si el contexto es una conversación entre dos personas, puede significar que la persona que esa persona cree que la ocultas algo.
Rascarse el cuello: Que una persona realice este gesto mientras te habla significa que no está seguro de lo que te está diciendo.
Asentir con la cabeza: Es un gesto contagioso, que en la mayoría de ocasiones tiene un significado positivo, ya que comunica interés y acuerdo. Pero si el gesto se realiza varias veces y a gran velocidad significa que ya no quiere escuchar más.
Brazos cruzados: Es una postura de lenguaje corporal defensiva muy conocida que significa rechazo o desacuerdo. Pero hay que tener cuidado con este gesto, porque puede significar que la persona tiene frío, por lo que debes tener en cuenta el contexto.
Manos por detrás de la espalda: Es una posición que demuestra confianza y muestra que la persona que habla no tiene miedo. Además esta postura puede ayudar en momentos de inseguridad a ganar confianza.
Palmas de la mano abiertas: Realizar este movimiento en lenguaje no verbal significa honestidad y lealtad. Generalmente se realiza como muestra de que no se esconde nada a las personas que lo realizan, por lo que aporta credibilidad en la comunicación.
Piernas cruzadas: Se trata de actitud defensiva y cerrada. En un contexto social, cuando una persona adapta esta postura con brazos y piernas cruzadas significa que no está sumergida en la conversación. En un contexto de negocios significa que la persona está cerrada mental, emocional y físicamente.
Tobillos cruzados: Este signo sigue estando dentro del lenguaje corporal defensivo, al igual que cuando cruzamos las piernas. Este gesto se realiza con el objetivo de mantener el control.