De conformidad con lo recogido en el artículo 26.1 del Reglamento Orgánico de las escuelas infantiles de segundo ciclo, realizaremos una autoevaluación nuestro funcionamiento, de los programas que desarrollan, de los procesos de enseñanza y aprendizaje y de los resultados del alumnado, así como de las medidas y actuaciones dirigidas a la prevención de las dificultades de aprendizaje, que será supervisada por la inspección educativa. 

El resultado de este proceso se plasmará en una memoria de autoevaluación que será aprobada e incluida en el Sistema de Información Séneca antes del 30 de junio de cada año. 

El proceso arranca cada año con la memoria de autoevaluación. Se valorarán la consecución de los factores clave propuestos durante el año. Puede ocurrir, por una lado, que se consigan y por otro que queden en proceso y serán tenidos en cuenta para el próximo curso. De esta forma ya establecemos unas posibles propuestas de mejora.

Con el final de curso obtenemos los indicadores homologados con los resultados obtenido en los últimos tres año y en comparativa con los centros de nuestro mismo ISEC (indice socio/economico/cultural). 

Además realizamos una memoria de la formación en el centro para unas posibles propuestas de mejora para el próximo curso.

Junto a esto, el centro realiza una encuesta de satisfacción entre sus padres y madres.

A partir del curso 23/24, en 4º de primaria se realizará una evaluación de diagnóstico.

Al comenzar el curso siguiente y tras la evaluación inicial, el centro elabora su plan de mejora teniendo en cuenta:

• Los factores clave no conseguidos/en proceso, así como las posibles propuestas de mejora.

• Los indicadores homologados.

• Encuestas de satisfacción.

• Resultados de la evaluación de diagnóstico.

• Mejoras en la formación en centro.

Así comienza de nuevo la evaluación de nuestro centro.