Enfermedades autoinmunes

Generalidades sobre el sistema inmune

El sistema inmune o inmunológico es aquel conjunto de estructuras y procesos biológicos que protege a un organismo contra las enfermedades, identificando y eliminando células patógenas. Este sistema detecta una amplia variedad de agentes, desde virus hasta parásitos intestinales, y necesita distinguirlos de las células y tejidos sanos para funcionar correctamente. Por lo tanto, se trata de un sistema de reconocimiento molecular que mantiene la identidad bioquímica del organismo.

Bajo el prisma de la BD resaltaremos especialmente el concepto de identidad bioquímica. Por identidad entendemos quién soy yo. Cuando esto no se tiene claro, la persona trata de ser, de hacer o de sentir algo, y al mismo tiempo se impide realizar esa acción. Normalmente esto ocurre porque la persona no se siente capaz, incluso es posible que crea que «no vale», lo que la lleva a reprimirse y anularse. Estas son las condiciones psíquicas idóneas para manifestar biológicamente una enfermedad autoinmune.

El sistema inmunológico no solo es el encargado de colaborar asistiendo a la acción infecciosa de los microorganismos (tal y como hemos visto anteriormente), también es la culminación de un largo proceso evolutivo que se concreta en una red de células especializadas con un cometido en apariencia simple: velar por nuestra supervivencia dando un Sentido Biológico a todo un intrincado camino evolutivo.

Una característica relevante de nuestro sistema inmunológico es la capacidad de   adaptarse; esto tiene un gran Sentido Biológico. El ser humano tiene un sistema inmunológico innato y otro adaptativo. Tal como decía, este último nos permite evolucionar y adaptarnos a los cambios. El sistema inmunológico innato está compuesto por macrófagos, neutrófilos, mastocitos y células dendríticas, mientras que el sistema inmunológico adaptativo está compuesto por linfocitos, leucocitos, anticuerpos y células T, entre otros.

Los sistemas inmunitarios de los vertebrados constan de muchos tipos de proteínas, células, órganos y tejidos que se relacionan en una red elaborada y dinámica. Como parte de esta respuesta inmunitaria más compleja, con el tiempo el sistema inmunitario se adapta para reconocer patógenos específicos de manera más eficaz. A este proceso de adaptación se le denomina inmunidad adaptativa o adquirida, y es capaz de crear una memoria inmunitaria. La memoria inmunitaria creada a partir de una respuesta primaria a un patógeno específico proporciona una respuesta mejorada cuando se producen nuevos encuentros con ese mismo patógeno. Este proceso de inmunidad adquirida es la base de la vacunación.

Estructuras del sistema inmune

Entre sus estructuras se encuentra:

• Adenoides

• La médula ósea

• El timo

• El bazo

• Las amígdalas palatinas

• El ganglio linfático

• La red de ganglios linfáticos

Adenoides

Se trata de la masa o tejido linfoide situado cerca del orificio interno de las fosas nasales, en el techo de la nasofaringe. Cuando las adenoides se hipertrofian, el conflicto se relaciona con un bloqueo de la nariz para evitar oler las cosas que producen daño, o para no oler lo que se desea oler.

La médula ósea

Representa el núcleo más hondo de nuestro ser, donde nacen las células inmunes capaces de proteger el organismo. En ella se reflejan biológicamente todos los valores, lo que da valor a la vida. Sin ese valor, la vida carece de sentido. 

El timo

Órgano linfoide primario en el cual se diferencian los linfocitos que salen de la médula ósea. También puede influir en el desarrollo de las glándulas sexuales y en el crecimiento del individuo.

Un síntoma o enfermedad que afecte al timo tendrá relación con conflictos de negarse a aceptar el crecimiento y la maduración, vinculados a la función de defensa dentro de la familia. Se trata de situaciones en las que al sujeto le han quitado algo que le pertenecía —puede ser un trabajo, un cónyuge o un objeto material? y en las que se ha sentido «sin defensa», sin saber cómo reaccionar.

El bazo

Se localiza en el abdomen. Su función consiste en filtrar la sangre para capturar y destruir los eritrocitos viejos que han perdido o mermado su función de transporte de oxígeno.

Los conflictos están vinculados con la noción de destruir a la familia: «siento que no pertenezco a esta familia», «mi sangre no es buena».

Veamos, por ejemplo, el caso de una adolescente con un tumor en el bazo. Sus padres se pelean constantemente y ella lo vive con culpa pues cree que discuten por su causa y que es ella quien está destruyendo la familia.

Las amígdalas palatinas

Son dos masas ovaladas situadas a ambos lados del istmo de las fauces. Protegen la entrada de las vías respiratorias de la invasión bacteriana. Su inflamación significa que el afectado vive una situación que lo ahoga, ante la cual inhibe sus sentimientos de cólera y frustración. También tiene relación con no poder atrapar algo y con la búsqueda del bocado afectivo.

El ganglio linfático

Filtra la linfa para eliminar bacterias, partículas perjudiciales, contaminantes, etcétera, y así evitar su distribución por el cuerpo. Su afectación representa una gran dificultad para afrontar el peligro, vivida con desvalorización y angustia. Cuando el ganglio se inflama, el sujeto está en fase de curación y de resolución del conflicto. Muchas veces esta reacción puede ser muy exagerada, y se necesita medicación para evitar males mayores y hacerla más soportable para el sujeto afectado. 

Recapitulación

Tanto la inmunidad innata como la adaptativa dependen de la habilidad del sistema inmunitario para distinguir entre las moléculas propias y las que no lo son. Las moléculas propias son aquellos componentes de un organismo que el sistema inmunitario distingue de las sustancias extrañas.

Un tipo de moléculas extrañas son los llamados antígenos , sustancias que se enlazan con receptores inmunitarios específicos y desencadenan una respuesta inmunitaria.

Las enfermedades autoinmunes

Ante este tipo de enfermedades, debemos cuestionarnos: ¿para qué me ataca mi sistema inmunitario y no reconoce mis órganos como propios? ¿Cuál es el Sentido Biológico de tal despropósito? Quizá haya que buscar las respuestas en el sistema psíquico: una parte de mí rechaza a otra parte de mí. Hay una lucha interior. Hay un profundo sentimiento de «no vivir», de «no poder ser yo».

Mi inconsciente biológico me da la solución: destruye aquellos órganos que están en relación directa con mi conflicto emocional. Por ello hay que estudiar cada enfermedad inmune buscando su Sentido Biológico. El Sentido Biológico básico es una desvalorización profunda: «he sido atacado y no he podido defenderme».

Se reconocen más de ochenta enfermedades autoinmunes. Destacaremos las siguientes:

La esclerosis múltiple

Aparecen lesiones desmielinizantes, neurodegenerativas y crónicas en el sistema nervioso central. La psique de la persona con esta enfermedad demuestra una gran rigidez mental; se

trata de sujetos autoexigentes, inflexibles, intransigentes. Hay una energía psíquica excesiva que produce un recalentamiento del sistema nervioso, y de alguna forma funde su protección o mielina. La función de la mielina es proteger, entre otros elementos, el potencial de membrana. Una analogía de lo que estamos expresando sería la de un cable eléctrico que solo es capaz de soportar determinada intensidad.

Si esta se sobrepasa de forma continuada, se produce un recalentamiento que provoca que el recubrimiento o aislante empiece a deteriorarse. La persona con esta enfermedad se paraliza porque cree que nunca sabe lo suficiente, que no está suficientemente preparada; duda del camino a seguir porque siempre piensa en que pensarán los demás, y por todo ello presenta un conflicto importante de desvalorización. A ojos del exterior parece ser una persona indecisa, pero en realidad es una persona tan rígida, y se exige tanto, que antes de fracasar prefiere no

moverse.

Otro conflicto importante es: «si me muevo, muero».

En muchos casos hay conflictos de doble acción o doble obligación: quiero estudiar, pero también quiero ser madre. La persona no ve, o no sabe ver, que quizás se puedan hacer las dos cosas a la vez; es tan exigente que no se permite términos medios: o todo o nada. No cabe la posibilidad de estudiar a un ritmo más lento que le permita hacer las dos cosas.

En esta enfermedad y en las relacionadas con el sistema inmune nunca hay que dejar de buscar si en el árbol genealógico hay «fantasmas». Se trata de informaciones de algunos de nuestros ancestros que vivieron situaciones de máximo estrés en las que la vida pudo estar en juego.

Esclerodermia

Es una enfermedad del tejido conjuntivo que produce cambios en la piel, los vasos sanguíneos, los músculos y los órganos internos. A esta dolencia también se la llama la enfermedad de la momia, pues es como si la persona fuera secándose y le queda una sonrisa momificada.

La persona con esclerodermia tiene varios conflictos, siendo uno de los más importantes el de desvalorización y el de protección. Se trata de personas que siempre se sienten heridas y desprotegidas. Como veremos, son portadoras de programas muy duros de desprotección y abandono. Hay una gran carga transgeneracional y del Proyecto Sentido.

La esclerodermia afecta a la hipodermis y la grasa desaparece; es el conflicto de desprotección y abandono. En el caso que presento esto está claro, porque la persona está viviendo el programa de su madre.

Otro conflicto bastante evidente es el de aislamiento. Tengo que aislarme del sufrimiento.

Los síntomas físicos de la esclerodermia son:

• Calcinosis: depósitos de calcio en la piel.

• Fenómenos de Raynaud: espasmos vasculares de frío y calor.

• Disfunción esofágica: reflujo de ácido y disminución de la movilidad.

• Esclerodactilia: engrosamiento y estiramiento de la piel en las manos y en los dedos de las manos.

• Telanglectasia: dilatación de los capilares de la piel.

En el estudio del árbol genealógico veremos muchas situaciones de hijos ilegítimos, hijos fuera del matrimonio, incestos, etcétera. En el estudio del Proyecto Sentido veremos graves conflictos en los que la madre resta valor al padre.

Tiroides Hashimoto

Afecta a la glándula tiroides, puede producir bocio y se manifiesta normalmente con hipotiroidismo.

Siempre hay un conflicto de tiempo y el Proyecto Sentido es muy importante, pues muchas veces la madre no desea tener al hijo, o no ve el momento de tenerlo. La persona vive  permanentemente la necesidad de ser deseada y querida.

El sida-VIH

Es la enfermedad autoinmune por excelencia. Puede manifestarse y dar diversos síntomas en diferentes órganos.

Como tiene que ver con la sangre, el conflicto más importante es desaparecer de la familia. Antes muerto que ser reconocido. El sida se relaciona con la homosexualidad, y el por qué es evidente: «ser homosexual es un problema para la familia». La persona prefiere morir antes de dar un disgusto a su familia.

Diabetes tipo I

La diabetes tipo I puede darse a cualquier edad, pero se diagnostica con más frecuencia en niños, adolescentes o en adultos jóvenes. En la diabetes tipo I, las células beta producen poca o ninguna insulina. En esta enfermedad están involucrados conflictos de repugnancia, asco y resistencia. La falta de insulina provoca que el azúcar se acumule en la sangre y no pase a las

células. El azúcar es un anticongelante y, como afecta a la sangre, podemos deducir que tiene que ver con que las relaciones son muy frías. Como es una enfermedad autoinmune, las relaciones frías son con uno mismo. ¿Cómo me relaciono conmigo mismo?, es una de las preguntas que la persona debería hacerse. ¿De qué o de quién me aíslo? ¿Me siento aislado? Mis relaciones me repugnan, me dan asco. Muchas veces tengo que aguantar situaciones inamovibles, tengo que resistir, tengo que ser yo, me quieren cambiar, quieren que sea de una manera determinada. Todo esto se puede vivir en soledad, en aislamiento.

La diabetes también es un conflicto de dividir a la familia, de sospechar de los demás; siento desconfianza porque me pueden engañar. Uno no se fía nunca de la familia ni de nadie, vive sospechando de alguien, o bien alguien sospecha de uno.

La alergia

Como ya hemos visto, la alergia es una reacción exagerada al alérgeno o sustancia peligrosa. El Sentido Biológico es prevenir, porque hay un peligro inminente. Es una señal de alerta ante un anclaje y está relacionada con una situación conflictiva que tiene una gran carga emocional.

Las distintas manifestaciones de las reacciones alérgicas estarán relacionadas con el conflicto en sí. Por ello, si la reacción es en la piel, habrá que buscar conflictos de contacto o separación; si la manifestación clínica es en la glotis, habrá que buscar situaciones de miedo y/o de ahogo, y así sucesivamente.

Artritis reumatoide

Es una enfermedad inflamatoria sistémica autoinmune caracterizada por una inflamación persistente de las articulaciones, que en el caso típico afecta a las pequeñas articulaciones de manos y pies, produciendo su destrucción progresiva y generando distintos grados de deformidad e incapacidad funcional. Sus características clínicas son: dolor, inflamación, rigidez y pérdida de función articular.

Se dan conflictos de profunda autodevaluación en los que la persona se encuentra sola, con una gran falta de calor familiar. Es una enfermedad progresiva, por lo tanto los conflictos son repetitivos y reiterativos. La persona puede buscar el reconocimiento de algún familiar, por ejemplo el padre, y por ello su sintomatología se puede presentar en las manos. Aquí los conflictos tiene que ver con lo que se explicó en el mesodermo nuevo: donde esté la crisis reumatoide, allí hay que empezar a buscar el conflicto.

Espondilitis anquilosante

Es un dolor y endurecimiento paulatino de las articulaciones. Afecta a la columna y a los ligamentos de las zonas cervical, lumbar y la articulación sacro-ilíaca. Tiene como característica la hinchazón en las vértebras y en las articulaciones entre la columna y la pelvis. Son personas que soportan una gran carga emocional, no saben decir que no y siempre se devalúan a sí mismas. Se trata de sujetos anulados, con creencias del tipo: «no existo». Tienen que demostrar constantemente su valía, y por ello aguantan todo. Su desvalorización es tan profunda que lo que hacen nunca les parece suficiente.

Cómo abordar la enfermedad autoinmune

Para abordar en consulta los casos de personas con enfermedades autoinmunes, siempre hay que tener presentes los puntos siguientes:

1. Hay una gran carga transgeneracional. El estudio del árbol genealógico es fundamental. Hay que buscar situaciones de los ancestros en las que se hayan vivido abandonos, haya habido hijos ilegítimos, no deseados, hayan sido cuidados por otros familiares y no por sus padres, hayan sido hijos de abusos y/o violaciones, etcétera.

2. Siempre hay que estudiar el Proyecto Sentido. Hacer consciente al cliente o consultante de qué estados emocionales vivió su madre desde la concepción hasta los tres años aproximadamente.

3. Hay que analizar concienzudamente la situación en la cual se manifiestan los primeros síntomas y en qué parte del cuerpo surgen. Se ha de buscar la situación o situaciones desencadenantes, el shock emocional que produce la activación o la manifestación del síntoma.

Nuestro objetivo  consiste en llevar a la persona  a un estado de  comprensión para que pueda cambiar sus percepciones y sentimientos.