Versículo de memoria: Apocalipsis 2:2-5
Cuando uno es bautizado en Cristo, recibe el Espíritu Santo para permanecer con uno (ver Hechos 2:38; Romanos 8:9). El cristiano constantemente debe estar consciente de que Dios mora en él y de que el poder con que resucitó a Jesús de entre los muertos actúa en él (lee Efesios 1:19-20 y II Corintios 4:1-7). Esto quiere decir que cada cristiano debe estar atento a su propia incapacidad y por consiguiente necesita a Dios para su vida.
SE REQUIERE UN COMPROMISO TOTAL
Cuando Jesús comenzó a explicarles a sus apóstoles y a otros seguidores lo que significa el cristianismo, El nunca dijo nada que insinuara que era nada menos que dar toda la vida por el Señor. Una actitud correcta y una acción adecuada surgen de nuestra sumisión al señorío de Cristo.
Lea Hechos 2:36. Aquí vemos que Jesús es el Señor
Lee Filipenses 2:9-11 ¿Cómo debe responder la gente al liderazgo del Señor?
En tus propias palabras describe cómo debes sentirte hacia Jesús como Señor:
Lea Mateo 6:24.
¿Cómo puede uno equivocadamente intentar a servir a dos señores?
Cuando uno se da cuenta de que Jesús exige ser nuestro amo, entonces está listo para considerar la clase de compromiso que él debe hacer si va a ser discípulo fiel. Lee Mateo 13:44-46.
¿Cuál es el mensaje de estas ilustraciones?
Lee Marcos 12:28-31. ¿Cuántas veces usa Jesús una forma de la palabra todo?
En los siguientes versículos describe el tipo de compromiso o entrega que Dios requiere de sus discípulos.
Filipenses 1:2-23; 3:7-8.
Gálatas 2:20.
Describe el compromiso de Pablo mientras que consideras estos versículos y los que has leído.
Romanos 9:1-3. ¿Hasta qué punto estaba dispuesto a sacrificarse?
II Corintios 12:14-15. Él estaba dispuesto a…
¿COMO DEJA UNO SU PRIMER AMOR?
Una vez que comprendemos el compromiso que Dios exige y vemos el gran entusiasmo que tenían los primeros cristianos por la obra, podemos ver lo que significa el "Primer Amor." Lee Apocalipsis 2:1-7. Describe las cualidades positivas en la vida de estas personas.
Podemos estar muy ocupados "trabajando para el Señor" y aún perder nuestro primer amor. Uno puede ser "doctrinalmente sano" y perder su primer amor. Uno puede ser paciente en las persecuciones y perder su primer amor. Uno puede ser una persona devota a la oración y aún perder el primer amor. Uno puede ser agresivo en la evangelización y aún perder su primer amor.
MANTENER NUESTRO PRIMER AMOR ES SENTIR UNA PROFUNDA
NECESIDAD POR DIOS DIARIAMENTE
Cuando Dios sacó al pueblo de Israel de la esclavitud en Egipto, los mantuvo recordándose de que no podían vivir sin El. Constantemente se quejaban de su incapacidad para hacer sus propias provisiones, pero Dios usó esto para mostrarles su necesidad de Él.
¿Qué advertencia le dio Dios a los israelitas en Deuteronomio 8:10-14?
¿Cuándo estamos más dispuestos a olvidarnos de Dios?
Lee Proverbios 30:8-9. ¿Cuáles son los dos extremos que pueden llevarnos a perder nuestro primer amor?
Dios avisó a la iglesia de Laodicea que por ser tibios Él los vomitaría de su boca, pero ¿cómo se consideraban ellos a sí mismos? Lee Apocalipsis 3:17.
Si los cristianos pueden mantener constantemente un gran sentido de necesidad para Dios, pueden más humildemente someterse al señorío de Cristo y mantener el fervor ardiente y el amor sincero para Cristo, lo cual manifestaban los discípulos del primer siglo.
CONCLUSIÓN
Mientras que Pablo crecía, tanto más aumentaba su humildad y le daba gloria a Dios por su crecimiento. Se veía a sí mismo como "el menor de los Apóstoles" (I Corintios 15:9-10). Debido a su gran necesidad de Dios, Pablo se podía sentir muy cerca de Él y como resultado, querer responder a su deuda predicando el evangelio a todo el que lo escuchara (Romanos 1:14-16). Para medir tu amor, mientras que lees estas escrituras, examina tus sentimientos hacia el Señor y hacia los que están perdidos.
Responde las siguientes preguntas…..
1. ¿Sientes que amas al Señor fervientemente?
2. ¿Estás luchando fervientemente para alcanzar a los "no-cristianos" para el Señor? Revisa tus metas espirituales y mide tu progreso. Evalúa también el tiempo que le dedicas a tu estudio y oración individual.
3. ¿Puedes ver cómo Dios trabaja a través de ti para multiplicar a los discípulos en el área donde tú vives?
4. ¿Estás compartiendo tu fe con los que no son cristianos?
5. ¿Estás buscando la comunión con otros cristianos para aumentar tu fe y animarse mutuamente?