Jorge Luis Borges
El cómplice

Me crucifican y yo debo ser la cruz y los clavos.

Me tienden la copa y yo debo ser la cicuta.

Me engañan y yo debo ser la mentira.

Me incendian y yo debo ser el infierno.

Debo alabar y agradecer cada instante del tiempo.

Mi alimento es todas las cosas.

El peso preciso del universo, la humillación, el júbilo.

Debo justificar lo que me hiere.

No importa mi ventura o mi desventura.

Soy el poeta.