Ergates faber en alcornoque

Ergates faber es una especie propia de los bosques de coníferas, de cuyo leño se alimentan las larvas siempre que el árbol lleve un par de años muerto (Vives, 1984 y 2000). Sin embargo excepcionalmente se ha citado su relación con especies de frondosas caducifolias, de los géneros Alnus y Populus (Bense, 1995, citado en González et al, 2007).

A lo largo de mi prospección de esta especie en la provincia de Málaga, la he localizado tanto mediante el hallazgo de ejemplares adultos, como de perforaciones, larvas o restos de ejemplares, siempre en bosques autóctonos de pinos y pinsapos y en los troncos muertos de éstos (68 registros, Martínez, 2012). Sin embargo en cuatro ocasiones he encontrado ejemplares adultos o sus restos ligados a alcornoques. Aunque no he podido acceder al trabajo de Ulrich Bense, los estudios entomológicos con frecuencia se limitan a aportar listados de insectos y sus localizaciones y especies hospedantes sin detallar mucho más allá las circunstancias del hallazgo. Por eso a continuación paso a detallar el contexto de estos cuatro registros, con la finalidad de valorar la posibilidad de que Ergates faber pueda haberse desarrollado con éxito en dicha frondosa.

Como precisión previa hay que señalar que en los cuatro casos los hallazgos se localizan en zonas en las que se mezclan de forma natural el pino negral con el alcornoque, lo que ya nos da una idea de lo inseguro de la atribución al alcornoque de estos registros.

Ergates faber en alcornoque, 1.

El primer registro se refiere a los restos (cabeza y pronoto) de un macho sobre un tronco caído de alcornoque. Como se aprecia en las fotos, el tronco de alcornoque se encontraba bastante descompuesto, reseco y desmenuzado, por lo que se deduce que debía llevar bastantes años caído. Este tronco presentaba varios orificios de emergencia de imagos compatibles, en forma y tamaño, con los que practica ergates faber en las coníferas; sin embargo, estos orificios se asimilan perfectamente a los de su pariente cercano Prinobius myardi. Además, en la zona existe una población de esta última especie, puesta de manifiesto en numerosas perforaciones en otros alcornoques en pie. Además, se trata de una zona de contacto entre las peridotitas de Sierra Bermeja (pobladas por Pinus pinaster y por E. faber) y los gneises y esquistos del Valle del Genal, poblados por alcornoques con quejigos y por Prinobius myardi.

Dadas todas estas circunstancias, y aunque los restos de E. faber estaban sobre leño de alcornoque, creo que esta cita no se refiere al desarrollo de E. faber en esta quercínea, sino que es más probable que los restos se encontraran allí traídos por algún depredador o por algún otro motivo. Por tanto, el primer hallazgo de E. faber en alcornoque probablemente no se refiera a su desarrollo larvario en dicha especie de frondosa.

Ergates faber en alcornoque, 2.

El segundo registro consiste en el hallazgo de los restos casi completos de un macho de Ergates faber al pie de un alcornoque en buen estado, junto a la carretera que sube desde Estepona a Sierra Bermeja por el puerto de Peñas Blancas. Este alcornoque está sano si bien presenta una gruesa herida en la corteza en la parte baja del tronco, con el corcho engrosado por el paso de los años. En la madera del borde de dicha herida se observan un par de perforaciones que por tamaño y forma son compatibles tanto con E. faber como con P. myardi. De nuevo la zona se encuentra en la transición de las peridotitas con P. pinaster a los gneises con Q. suber. Sin embargo, en esta zona no conozco poblaciones de P. myardi, a pesar de haberlas buscado. Sí existen dichas poblaciones en los alcornocales de Casares, a unos 9 km en línea recta al oeste. Pero no en esta zona, que yo conozca. Por tanto, esta cita podría referirse a la colonización de Q. suber por E. faber. Sin embargo, no se puede descartar que dichos orificios provengan de una población reducida o aislada, o incluso extinta (ya que los orificios no son recientes) de P. myardi. Por tanto, en este caso, yo diría que las posibilidades se reparten al 50 por 100 entre P. myardi y E. faber.

Ergates faber en alcornoque, 3.

En este caso se trata del hallazgo de un macho vivo de E. faber posado bajo la línea de corte del corcho de un alcornoque. Éste se encontraba en buen estado y sin perforaciones de ninguna clase, y en la zona (Monte de Bornoque-Moratán, entre Istán y Monda, Málaga) los pinos negrales, también autóctonos, invaden de forma muy agresiva los restos del alcornocal.

Mi conclusión es clara: esta cita no tiene nada que ver con el desarrollo de E. faber en alcornoque, sino que simplemente se trataba de un ejemplar desubicado de sus refugios naturales, que había recalado por accidente en dicho alcornoque. Tan despistado estaba, que habiéndolo encontrado a media tarde (17:30), por la noche seguía en el mismo lugar.

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