Santiago, 30 de Julio del 2010
DECLARACION PÚBLICA
Ante las lamentables declaraciones de la Vicepresidenta Ejecutiva de la JUNJI expresadas en las últimas semanas, los abajo firmantes declaramos:
Ximena Ossandón - a través de sus declaraciones – ha demostrado que no posee la experiencia ni la vocación pública necesaria para desempeñar su cargo en la JUNJI, ya que sus dichos ponen al descubierto su profundo desconocimiento sobre la realidad de las mujeres chilenas en condiciones de vulnerabilidad. Al mismo tiempo, sus declaraciones evidencian la falta de respeto con las mujeres que se ven beneficiadas por la labor de la JUNJI, pasando a llevar uno de los principios básicos de la institución que encabeza, como es la promoción del buen trato.
Es intolerable que, luego de 20 años de avance en los derechos y condiciones de las mujeres, una alta autoridad de gobierno descalifique de manera tan desafortunada a las mujeres.
Creemos que la Vicepresidenta Ejecutiva no puede ni debe poner en tela de juicio la forma en que cada mujer distribuye su tiempo durante la crianza de sus hijos. Por el contrario, su opinión se basa en prejuicios particulares y con un marcado sesgo religioso, el cual no corresponde a un cargo de gobierno.
Junto a lo anterior, creemos que sus declaraciones frente al rol exclusivamente de las mujeres en la crianza de los hijos e hijas, y al no contemplar la labor de los padres existentes en este proceso dan cuenta de una mirada que contribuye a legitimar las desigualdades que aún subsisten en la sociedad entre hombres y mujeres. A esto se suma la ubicación de imágenes religiosas frente a una dependencia pública, lo que constituye un abuso de autoridad y un acto que atenta contra el principio constitucional de la separación entre Iglesia y Estado, y el carácter pluralista que debe tener un servicio público, el cual se financia con los impuestos de todos/as los/ciudadanos/as (católicos/as, agnósticos/as, no creyentes y de otros credos).
Constituye un hecho lamentable – y un evidente retroceso – en los avances alcanzados en materia de equidad de género, que Ossandón no sea capaz de comprender que en el pasado la JUNJI ha otorgado una enorme oportunidad de inserción laboral, y continuación de estudios para muchas mujeres, como también la posibilidad de ingresar a sus hijos e hijas a la educación pre escolar, cumpliendo de ésta forma con el derecho básico de la educación de los niños y niñas.
Por último, hay que alertar a las chilenas y los chilenos lo que aparece como un intento por desmantelar los sustantivos avances en las políticas públicas a favor de mejorar las condiciones laborales de las mujeres y el bienestar de las niñas y niños del país.
Por todo lo anterior, exigimos la renuncia de Ximena Ossandón al cargo de Vicepresidenta de la JUNJI, junto con una explicación sobre si el accionar de la Sra. Ossandón responde a una orientación gubernamental o una acción individual.
Movimiento Nueva Izquierda