Durante los últimos años el fondo solidario de crédito universitario (FSCU) más conocido como crédito fondo solidario ha sido víctima de diversas modificaciones que lo dejan atrás en la estructura de financiamiento de aranceles actual.
En la actualidad, si una persona no postula al FSCU al inicio de su carrera, ya no podrá hacerlo durante el transcurso de esta, incluso si sus condiciones socioeconómicas cambiaran drásticamente. Ésto se ha transformado en un problema grave para aquellos alumnos que fueron afectados por el terremoto, cuyo caso cae en este vacío del FSCU. Sólo les queda postular al crédito con aval del estado (CAE), cuyas condiciones de pago son por lejos menos convenientes para el alumno, sin considerar el indignante hecho que ahora está aportando de su dinero a las utilidades del banco que se adjudicó su deuda.
El FSCU necesita constantemente recibir dinero desde las arcas fiscales, debido a sus malas tasas de recuperación de los dineros. Para muchas personas, el FSCU se ha tranformado en una forma de educarse gratuitamente a costa de la deuda de los actuales estudiantes del sistema universitario.
Los mecanismos de recuperación del FSCU pueden ser mejorados, la posibilidad de recuperar fondos por medio de la declaración de impuestos fue un avance, pero es una medida parcial aún.
En mi personal opinión, pienso que los estudiantes universitarios no podemos exigir una educación gratuita en un país que tiene 1000 otros asuntos más prioritarios en qué gastar su dinero.En nuestro contexto actual, nos tranformaríamos en un grupo de privilegiados a las costillas de toda la nación. Existen muchas formas de que los estudiantes y el estado compartan la carga económica de la educación superior, la idea del FSCU es mucho mejor que agregar a un privado e hipotecar las rentas futuras del estudiantado al lucro de personas que no lo necesitan, la idea de solidaridad: devolver el dinero y entregar los intereses en ayuda de otros estudiantes, es lo que hay que defender a toda costa. Si es necesario subir la tasa de interés del crédito o reducir los plazos del préstamo, que se haga! las condiciones de pago actual del FSCU son demasiado amables, eso también es irrisorio en un contexto donde se requiere urgentemente financiar la educación superior de miles de personas que , con esto, tienen una chance de movilidad social.
Y en este mismo sentido, esas personas que necesitan el FSCU se concentran principalmente en la educación superior privada. Por lo mismo, el FSCU no puede seguir siendo un privilegio de aquellos que alcanzan entrar al sistema de educación superior CRUCH, extender este beneficio a personas que ingresan a CFT e IP acreditados puede ser una buena medida, acompañado de mejoración en las condiciones de recuperación de los dineros, de tal modo que para el estado no signifique una carga imposible en el largo plazo.
No podemos quedarnos en la dicotomía público/privado, tenemos un pasado nefasto en decisiones económicas y el tiempo muestra y seguirá mostrando que ha sido un grave error el pensamiento neoliberal aplicado en el contexto de la educación, pero el actual estado de la política y de aquellos que tienen el poder muestra claramente que no hay ánimos para cambios de base, frente a esto podemos luchar por generar movimientos sociales fuertes que acaben con este show miserable, pero A LA VEZ debemos asegurarnos que, en el caso pesimista que no se logre el momentum político necesario, se logrén tranformaciones sociales que beneficien a la gente y mejoren sus condiciones ahora y no en el hipotético mañana de la revolución. La gente se merece que por un momento, se relaje la vena idealista y se agreguen a la lucha cosas realistas y más concretas en favor de las personas, incluso si esto significa posponer los ideales.
EL fin del autofinanciamiento y del endeudamiento apuntan a una meta mayor, más ambiciosa y por cierto, verdaderamente justa para las personas. Pero que no pase de nuevo lo que pasó con el movimiento pinguino: su mas puro idealismo fue el pie para el perfeccionamiento del sistema al cual se oponían.
La verdadera lucha del ideal se gana al largo plazo, en la concientización de la ciudadanía y en la existencia de grupos políticos que con honestidad puedan capitalizar esa conciencia. Aun queda mucho para alcanzar estas dos cosas. Esta es una lucha para que llegue el día en donde el país entero mediante este mal parido sistema poco representativo se imponga en las urnas a favor de un proyecto de igualdad y justicia social, y que esta vez sea una abrumadora mayoría quien sustente el cambio.
Todo atajo de esta vía solo repetirá dinámicas de la historia que ya se conocen muy bien y que al final de cuentas, dejan víctimas inocentes en el camino.
Que me perdonen por mi falta de optimismo!! pero no puedo dejar pasar y quedarme callado frente a lo que veo. El FSCU apenas sale defendido en las consignas del mov. estudiantil del confech!! siendo que es tan urgente defenderlo!!
Sergio Araneda Galarce
Delegado Bienestar Fech 2010
Miembro Nueva Izquierda Universitaria - www.niu.cl