Forma y contenido
©Por Abdel Hernández San Juan
Caracas and Houston, Texas, USA
Debido al grafismo, la inmediatez de sus líneas y el humor que despiertan sus obras, algunos han relacionado la obra plástica de Lázaro Saavedra con ilustradores y realizadores de historietas quienes usualmente comentan en sus caricaturas de modo directo el mundo social, pero las historietas de Lázaro distan de versar la sociedad en directo, antes bien, se refieren a intrincadas intríngulis que relacionadas a acepciones de retórica, ideología y relación entre forma y contenido, ofrecen especificidad a los modos como en los mismos materiales esta supuesto un modo único al arte y sus medios de versar la socioculturalidad.
este modo único no estriba solamente en que el arte está provisto de medios materiales propios dados en sus tecnicidades, especialidades y cultura material, pues está sola apreciación podría conducir a una separación de forma y contenido según la cual, si de un lado están los medios, técnicas y materiales, del otro estaría entonces el mundo social a secas, separado como otra cosa, respecto al cual entonces el arte, del mismo modo en que lo hacen el periodismo y otros medios, versaría la sociedad.
Detrás de esta separación entre forma y contenido esta supuesto, por un lado, que la forma es un instrumento recortado sobre un fondo del cual se dispone como de una herramienta para que la lengua o el lenguaje, aquello que en definitiva querríamos decir, sea dicho en ese material como el medio de ese fin del mismo modo en que podría serlo en cualquier otro medio, por otro lado, el supuesto de que la realidad social está provista de una ontología propia la cual perse a las formas con que nos referimos a ella, o los materiales que dispongamos para ese fin, exige ella misma supeditar cualquier forma, material o lenguaje a aquello que ella pide para que ese medio, material o lenguaje sean verídicos.
Todo ello como si la forma fuera algo que uno se pone y se quita, coge y deja al modo de una herramienta o medio de un fin algo que en gran medida desconoce la fenomenología profunda de las formas y su relación misma con el contenido y con lo que son un mundo y una realidad. El mundo social entonces, según esta separación, estaría en el otro lado de las formas, y desde su propia ontología estaría pasándole la cuenta a las formas, medios y técnicas, en el modo de un como si la realidad dijera, por valerme del tipo de recursos que usa lázaro donde hasta el marquito de la obra y el fondo pueden hablar, --como en las historias de Disney donde todo habla, arboles, animales, etc-- “respecto a mí como realidad todos los lenguajes son lo mismo, historieta, periodismo, film, artes plásticas.
La reflexión sobre el dilema de la relación entre forma y contenido como algo intrínsecamente relacionado, el hecho de que los contenidos no pueden ser separados de las formas y que la crítica de estas últimas es la crítica ella misma del modo que aquellos han adquirido, es una de las más centrales sino la más importante en todas las piezas de Lázaro un gran número de ellas consagradas a reflexionar plásticamente sobre esta relación, Lázaro ha ofrecido un modo de responder a este asunto según las especificidades de la plástica, el cómo estas contribuyen a un modo propio intrínseco a sus materiales, medios y especialidades, de tratar y versar el mundo sociocultural, las ideologías y la sociedad.
En su muestra con Rubén Torres Llorca Una Mirada Retrospectiva Lázaro desarrollo esto que antes había tratado en su muestra individuales Mesa Sueca y en sus primeras instalaciones eclécticas en las cuales a través de un modo que me arriesgaría a definir como Brechtiano, discute las ideologías del arte por el arte hacia sí mismo, el marquito de la obra, a la vez que también pone a todo el mundo en su lugar en modo desacralizador de lo cual no escapa nada, ni el paspartú de la obra, ni los fetichismos sublimados de la forma, ni la liniecita estilizada y los pruritos de la academia, ni Carlos Marx a quien baja a tierra y le dice deja toda esa fantasía de guajiro alemán impresionado con la industria y ponte aquí al mismo nivel humano del maniquí degollado en la clase de biología, ni los promulgadores de la realidad social a secas a quienes responde transformando en pieza artística realizada una máquina que señala con su aguja las ideologías, el detector de ideologías.
En vez de ser las obras evaluadas desde el afuera social por las ideologías de aquellos que deciden a que ideología responde la obra de arte, es aquí la obra de arte misma la que deviene ella en un detector de las ideologías de los espectadores y la sociedad, una evaluación revertida resultante de sus reflexione sobre la relación entre forma y contenido.
La reversión que realiza Lázaro con el detector de ideología no es nueva como modus operandis en el arte. Cuando Cristo se decide a empaquetar un museo de arte hace lo mismo aunque su tema sea otro. El museo, en que usualmente se exponen obras de arte con todas los supuestos, tradiciones, ademanes, cultura, estilos, ideologías y relaciones con la autoridad que ello supone, es empaquetado por el artista y transformado en una pieza artística, la instancia que muestra es entonces mostrada. En vez de evaluar las ideologías del arte desde un afuera social, será pues el arte el que evaluará las ideologías de la sociedad transformando la obra ella en un detector de ideologías.
Esta actitud iconoclasta y ecléctica, antiautoritaria en la que Lázaro y yo siempre hemos coincidido, no se queda solo en el detector de ideología revertido deviene en todo un desarrollo a través del cual sus propias piezas se vuelven a versar las reacciones socioculturales de los espectadores a las obras volviéndose estas hacia sus siguientes versiones o de acuerdo a nuevas obras, deconstrucciones entonces del modo que adquirieron determinadas ideologías hacia las obras en el campo, bien sea en la prensa, bien en la opinión especializada. Sobre el fondo de lo antes dicho para mi curaduría en rice university en 1997 Lázaro me propuso una muestra titulada Masage Mental la cual incluía su obra Curricular Vitae y una instalación que titulaba la muestra.
En Curriculum vitae se trataba de una serie donde las piezas que deberían ser las obras eran ellas mismas los ficheros de la obras, es decir, eran los ficheros de las obras en los que usualmente se ponen el título, el autor, detalles técnicos y fecha, realizados en el tamaño y formato que tendrían las obras, realizados en cartulina de unos 80 centímetros por cincuenta cada una y aproximadamente unos treinta expuestos en las paredes del rice media center art gallery, estos incluían entonces no solo lo ordinario de un fichero, sino también todo un desglose listado de recortes de prensa y recopilaciones de materiales sobre las reacciones de los espectadores y la crítica a muestras suyas previas los cuales as su vez devenían en objeto de las nuevas reflexiones del Lázaro dentro de estos ficheros, transformando el usualmente fichero de la obra, en un muestrario de sociología de los espectadores y sus reacciones, no precisamente aquellos que asistirían a mi curaduría, pero sí de aquellos que lo hicieron a muestras suyas antes, notas de prensa, publicaciones, nada quedaba exento de sus re-comentarios.
Masaje mental por el contrario era una parte de su block de notas y diario que escogió para llevarlas a pinturas a color donde específicamente Lázaro pintaba todo lo que él iba pensando, reflexionando y sintiendo durante un periodo de su vida en el cual trabajaba en la construcción para obtener su propia vivienda, su vida entre los constructores, las vicisitudes de verse alejado del arte sumergido en el trabajo fuerte de construir, los avatares de la vida diaria en la construcción, estas pinturas como ampliación a color de su diario, estaban entonces expuestas en un sistema expositivo independiente que Lázaro creo instalativamente con materiales propios al mundo de la construcción, cabillas, escombros, ladrillos, etc.
La transvanguardia estriba en esta iconoclasia y el modo como cada quien ajusta su balance es una cuestión de estilo autoral individual.
Las instalaciones de puré cierto es que parecían unas ejercicios de clase improvisados y otras modos de juntar lo que estaba al alcance, un inmediatismo realizativo que rompía esquemas y supuestos, exigiendo al espectador deslastrarse de estereotipos y preconcepciones para abrirse a lo desenfadado, pero en ningún modo resultaban nimias o irrelevantes por este motivo, había en Puré un tipo de elaboración que removía a los espectadores en todos los aspectos de su experiencia receptiva. Puré hacia de ello algo acentuado y exacerbado hasta que las obras parecieran parte de una parafernalia intencional llegando a comunicar un todo carnavalesco y festivo.
El balance de Puré, es una conjunción de sus distintas individualidades, Lázaro, la inmediatez del medio, el desenfado desacralizador, la primacía del concepto y lo que se quiere decir, Ciro, la grandilocuencia barroca de un todo amalgamado de partes que deben hacer armonía en la que algo del pop sobrevive muy reinventado, Ana, la apertura sensible y femenina a la relación entre las formas, el ser y lo social, Adriano, lo remanido y sobado, el volver los cansancios de la forma comentarios de la cultura, Ermi, el icono nítido con su referencia a la cultura estándar.
Las características de Puré siguieron presente en Lázaro como exponente principal y se fueron desgajando progresivamente hacia su completa individuación.
En una Mirada Retrospectiva la muestra comenzaba con una reunión de un grupo de supuestos investigadores del futuro, los mismos llegaban muchos años después al sitio de la exposición y mostraban esta última, la muestra en concreto de Lázaro y Rubén que los espectadores recorrían, como un hallazgo de esa investigación, es decir, la muestra era presentada por esos investigadores supuestos y las piezas de Rubén y Lázaro se desplegaban en la galería como lo que aquellos muestreaban a modo de un museo de curiosidades.
Hechas todas, por supuesto, por Rubén y Lázaro en su gran mayoría como piezas basadas en artefactos de la gente de la calle, carriolas, chivichanas y otras invenciones, eran presentadas al público como museografiadas por esos espeleólogos del futuro, un juego con un tipo de ciencia ficción.
Referencias
Abdel Hernandez San Juan, Lázaro Saavedra, untitled conference lectured at the Rice Media Center Auditorium, see tape recorded and film recorded contents at both transart foundation sound collection and the rice media center sound collection, as well as transart releases replacement of materials printed before the starting of the workshop, for more materials on Lázaro and puré see a paper on puré by Abdel Hernandez San Juan collected at transart, Rice University, Houston, Texas, USA, 1997
Abdel Hernandez San Juan and Fran Rodríguez, Curriculum Vitae: Curatorial research film on Lázaro Saavedra, including interview and visual documentación of his exhibits and works, directed by Abdel Hernandez San Juan and Fran Rodríguez and presented after the conference on Lázaro Saavedra lectured at the Rice Media Center Auditorium, Rice University, Houston, Texas, USA, 1997