Sesión 1. ¿El masculino siempre acaba en -o y el femenino en -a?
En esta primera sesión se presenta al grupo la situación de aprendizaje: en qué consiste la tarea final, a qué motivaciones responde, y cuáles son los aprendizajes previstos en el camino. Lo que se espera de los estudiantes es la elaboración colectiva de la entrada correspondiente a la expresión del género gramatical en español, con vistas a su publicación en una gramática básica destinada al alumnado recién llegado con un conocimiento elemental del castellano. Para ello, habrán de profundizar en qué es y cómo organiza la lengua el género gramatical y comunicar los resultados de su investigación haciendo uso del metalenguaje específico.
A continuación se lanza la primera pregunta: ¿El masculino siempre acaba en -o y el femenino en -a? Con ella, se propone abrir una reflexión colectiva por parte del alumnado a partir de su conocimiento intuitivo de la lengua con la guía del docente, que orientará con preguntas las reflexiones de los estudiantes. Se trata de propiciar la formulación de hipótesis, búsqueda de ejemplos y contraejemplos, etc., a partir de preguntas indagatorias como las siguientes:
¿Hay palabras masculinas que acaban en -a? ¿Y femeninas que acaban en -o?
¿Hay palabras que marcan la alternancia de género con otras terminaciones? ¿Qué ejemplos se os ocurren?
¿Cambia a veces la palabra para oponer masculino/femenino? ¿Cuántos ejemplos podéis aportar?
Por último: ¿Testigo es masculino o femenino? ¿Y periodista? ¿Cómo lo sabéis?
El objetivo de esta sesión es llegar a una primera aproximación acerca de los diferentes procedimientos (morfológicos, léxicos y sintácticos) con que cuenta el español para marcar el género. Con este propósito, se invita a los estudiantes a indagar a través de ejemplos concretos de la lengua partiendo de las preguntas exploratorias. No se trata de que respondan cada una de las preguntas sino de que estas sean una guía para investigar cómo funciona el género gramatical según los distintos procedimientos para marcarlo.
Se puede plantear el trabajo en grupos de tres para pasar posteriormente a compartirlo en gran grupo y anotar y sistematizar en un documento o en la pizarra las conclusiones de la sesión. Es importante que cada estudiante vaya recogiendo las conclusiones de cada sesión en su cuaderno o soporte de trabajo individual.