Miguel Hernández
Octava IV 

Torero

Por el lugar mejor de tu persona,

donde capullo tórnase la seda,

fiel de tu peso alternativo queda,

y de liras el alma te corona.

¡Ya te lunaste! Y cuanto más se encona,

más. Y más te hace eje de la rueda

de arena, que desprecia mientras junta

todo tu oro desde punta a punta.