Alfonsina Storni
Razones y paisajes de amor 

III - Paisaje del amor muerto

Ya te hundes, sol; mis aguas se coloran

de llamaradas por morir; ya cae

mi corazón desenhebrado, y trae,

la noche, filos que en el viento lloran.


Ya en opacas orillas se avizoran

manadas negras; ya mi lengua atrae

betún de muerte; y ya no se distrae

de mí, la espina; y sombras me devoran.


Pellejo muerto, el sol, se tumba al cabo

Como un perro girando sobre el rabo,

la tierra se echa a descansar, cansada.


Mano huesosa apaga los luceros:

Chirrían, pedregosos sus senderos,

con la pupila negra y descarnada.