En un segundo nivel de concreción de la metodología abordamos la manera de trabajar, es decir, qué estrategia didáctica vamos a seguir para aplicar los principios metodológicos anteriormente citados. El currículo nos insta a utilizar como tales la indagación y los proyectos de investigación, para que los alumnos trabajen sobre situaciones reales en las que tengan que aplicar los contenidos adquiridos. Nosotros recurriremos a la indagación para la superación de las distintas fases del proceso de enseñanza-aprendizaje, que vamos a ir abordando a través de las actividades. En este proceso seguiremos el modelo integrado de aprendizaje geográfico por descubrimiento basado en SIG (de Miguel, 2013). Fue inicialmente elaborado en Estados Unidos en 1994 y posteriormente modificado por Kerski y Favier en 2011 (citados en de Miguel, 2013):
Modelo de aprendizaje geográfico por descubrimiento basado en SIG.
Las seis fases del mismo (véase la figura anterior) son las siguientes:
Con las actividades abordaremos cuestiones curriculares como ¿qué es un mapa?, ¿cómo se orientan los mapas?, ¿cuáles son los puntos cardinales?, ¿qué tipos de planos conocemos?, ¿qué aplicación geográfica tienen las fotografías aéreas y las imágenes por satélite?, ¿qué es una brújula y para qué sirve? Y otras adicionales como ¿qué es un mapa digital?, ¿Qué diferencias existen con un mapa de papel?, ¿qué ventajas e inconvenientes puede tener la cartografía digital?, ¿para qué podemos usarla?, ¿qué es un GPS? o ¿para qué nos puede servir?
Mediante la indagación, buscaremos ejemplos datos geográficos en los libros de textos, otros libros, internet, etc. Le pediremos también a los alumnos que traigan al aula distintos planos (de sus casas, callejeros, etc.) y revisaremos los mapas disponibles en el aula. También tomaremos fotografías y otros datos en las visitas de campo.
Esta fase es la primera en la que el uso de todas las aplicaciones de cartografía digital del proyecto va a cobrar sentido. Veremos distintos ejemplos de los datos geográficos que hemos recopilado en la fase anterior. Conoceremos las posibilidades y los tipos de datos que nos ofrecen estos mapas digitales, lo que podemos obtener de ellos y lo que no.
Aquí trataremos de interpretar la información geográfica que hemos ido conociendo. Propondremos a los alumnos que vayan clasificando en distintas categorías los datos recopilados y que piensen en la utilidad que para ellos mismos puede tener la elaboración de mapas y planos personalizados. Analizaremos también la información que podemos aportar a un mapa destinado a la población en general.
En este punto del proceso, los alumnos deberían ser capaces de contestar por sí mismos las cuestiones planteadas en la fase A. En caso contrario, revisaremos los pasos dados hasta momento y buscaremos la información complementaria precisa para ello.
Con las actividades de la unidad didáctica, trabajaremos distintas formas de presentar los resultados de este proceso de investigación: la realización de un plano personalizado de la localidad, con información de interés para los alumnos y la ciudadanía; la inclusión de fotografías georreferenciadas, con incorporación de información adicional mediante códigos QR y realidad aumentada; y la exposición de estos trabajos: física en el colegio, y digital mediante una wiki.