Valoración del curso on-line “Nuevas tendencias en Física y Química”
Valoración del curso on-line “Nuevas tendencias en Física y Química”
Ana Cañas. IES Julio Pastor. San Sebastián de los Reyes (Madrid)
Tras ser invitada para impartir una sesión sobre la competencia científica en el curso Nuevas tendencias en Física y Química, un curso presencial diseñado por el grupo de profesores formado por Mª Sagrario Gutiérrez Julián, Mª Jesús Martín-Díaz y Miguel Ángel Gómez Crespo e impartido en el CRIF de las Acacias en el curso 2008-2009, Miguel Ángel me propuso que participara con ellos siendo tutora de dicho curso en su fase on-line. Para ello debía hacer un curso previo de Moodle para familiarizarme con el sistema. Quedé encantada, tanto de poder ser tutora de ese curso de formación permanente de profesores de Física y Química, con el que me identifico por completo, como de la formación que me ofrecían con la realización de un curso sobre la plataforma Moodle. Al curso siguiente empezamos con dos grupos de unos treinta y cinco profesores cada uno, siendo tutores on-line, Miguel Ángel y yo misma.
El curso trata de mostrar distintos enfoques e innovaciones en la enseñanza de nuestra especialidad, Física y Química, dirigidos fundamentalmente a su aplicación en el aula, haciendo, en todo momento, referencia al planteamiento teórico que los sustenta. El curso se compone de cinco bloques, que se detallan pormenorizadamente en el artículo de una de las componentes del grupo que diseñó el curso, Marisa Gutiérrez Julián. En este artículo comentaré las impresiones de los participantes, que se vertieron en las evaluaciones finales, en las distintas convocatorias.
Sobre el curso en su conjunto las impresiones han sido en su inmensa mayoría muy favorables. Encontramos comentarios como el de E.G. que dice “Es la primera vez que hago un curso on-line y he descubierto el gran potencial que tienen las TIC en la educación, ya que todo el curso es un ejemplo de ello.” O el de M.J.S.: “este curso ha supuesto para mí un descubrimiento. Me ha servido para introducirme en las investigaciones en didáctica de las ciencias, aprender a crear actividades, ser crítica con el trabajo que hago y procurar mejorar. Me ha hecho tomar conciencia de que es vital que enseñemos una ciencia atractiva, actual y cercana, para formar ciudadanos "investigadores" y críticos.” I.C. resalta que “la comunicación on-line entre profesor y alumno, es posible y muy cómoda. También el trabajo colaborativo realizado ha funcionado muy bien, y me sirve de ejemplo para poder enseñar a mis alumnos a trabajar de esta forma”. A.G. nos dice: “Este curso me ha parecido útil por diversas razones; he aprendido a reflexionar sobre las actividades y ejercicios que propongo a mis alumnos, a ampliar los objetivos que me marco cuando planteo las actividades y a "exprimir" más las capacidades de mis alumnos. También he recopilado ideas (algunas nuevas, algunas ya conocidas), prácticas de laboratorio, páginas web y simulaciones que me van a venir fenomenal para mis clases. Es muy interesante conocer la opinión de los compañeros y me hace ver mi profesión desde otros puntos de vista.”
Un aspecto positivo, especialmente relevante para nosotros y que encontramos repetido muchísimas veces en la evaluación de los participantes, es que el curso les ha hecho reflexionar sobre la propia actividad docente y replantearse la metodología que estaban utilizando. H.S. comenta: “Lo primero que debo reseñar es que el curso me ha obligado a reflexionar sobre mi actividad docente mucho más de lo hago habitualmente.” A.D.A. dice: “Me quedo sobretodo con el cambio de perspectiva de lo que debe ser una clase, y de las posibilidades que se abren.” D.C. explica: “Ha sido un curso intenso y tremendo en cuanto a la cantidad de cosas que he aprendido. Puedo decir que ahora paso mucho más tiempo que antes preparándome clases.”
Otras aportaciones muy valoradas en la evaluación son:
La utilidad de los foros. Porque facilitan la comunicación entre todos los participantes. Dice E.G.: “Las actividades organizadas en forma de foros donde todos los alumnos tienen que participar aportando algo, que a su vez queda visible para los demás, es una herramienta interesante que asegura la participación de todos los alumnos de un grupo, eliminando también los problemas de timidez que tantas veces tienen nuestros alumnos adolescentes y que limitan su participación en clase.”
La posibilidad de aprender de las aportaciones de otros compañeros. Esta es una de las reflexiones más repetidas. R.R. comenta: “Me han parecido muy interesantes las aportaciones de los participantes, creo que la comunicación entre colegas es algo muy importante y que a veces hacemos poco.”
El conocimiento de actividades de las pruebas PISA. También ha sido muy bien valorado el acercamiento a las pruebas PISA, porque estas presentan las actividades contextualizadas, condición necesaria para alcanzar la competencia científica. N.A. expone que “Todo lo trabajado en el curso me parece que tiene una utilidad real en el trabajo en el aula, desde el bloque más teórico, el primero, donde me quedó más claro el tipo de preguntas que utiliza PISA para evaluar competencias…” N.L. comenta: “Me han resultado muy interesantes las preguntas PISA. Mucho más interesantes y válidas que las preguntas mecánicas que les hacemos actualmente a nuestros alumnos para evaluar sus competencias. La dificultad está en que no puedes cambiar de unas preguntas a otras sin cambiar primero la forma de enseñar”, apuntando que para realizar un cambio en el tipo de actividades realizadas en el aula, es necesaria una reflexión y revisión en profundidad de la concepción que se tiene sobre la finalidad de la enseñanza de las ciencias. E.G. añade: “La información sobre PISA me ha venido muy bien para comprender la realidad. Qué diferentes puntos de vista se escuchan en los medios de comunicación.”
El trabajo en equipo a distancia, concretamente en un problema CTS. Este tipo de actividades resultó complejo al principio por no estar muchos de los participantes habituados a trabajar de esta forma; aunque finalmente los participantes mostraron, en general, su satisfacción con el proceso y los resultados obtenidos. A.J.V. comenta: “Para mí, sinceramente, lo que más me ha sorprendido, ha sido el trabajo en equipo. No estoy acostumbrado, y fue una gratísima experiencia trabajar con mis compañeros. Creo que es lo mejor que he hecho en el curso y es el trabajo del que estoy más orgulloso y fue realmente un trabajo de equipo. Cada uno supo dar una vuelta de tuerca sin que dejáramos de aprovechar nada de lo que cada uno propuso: lo dicho, una delicia.” A.M.A. sigue en la misma línea al decir: “Especialmente interesante me ha resultado la actividad del “Enfoque CTS” ya que nunca había realizado un problema de ese tipo ni trabajado en grupo de esta forma, algo a lo que pensaba me costaría adaptarme.” Para algunos, aunque una minoría, resultó difícil y no llegaron a disfrutar con la tarea.
Los materiales aportados y elaborados por los participantes, recogidos en bases de datos. Estas aportaciones fueron de las más valoradas. J.M.M. escribe: “me he encontrado con una fuente de recursos importantísima y casi inagotable para la docencia de nuestra asignatura.” C.M. comenta: “Lo que me ha parecido interesante son las bases de datos sobre webs educativas que hemos ido haciendo entre todos, que podemos consultar y hacer cosas nuevas siempre que el tiempo y los temarios nos lo permitan.”
La diferencia entre problemas y ejercicios. Para mostrar esta diferencia en el curso se presentan ejemplos de la resolución de problemas, con la intención de fijar criterios que ayuden a transformar las actividades en verdaderos problemas. Dice M.M.L.: “Me han parecido muy importantes las reflexiones sobre los ejercicios y problemas. Me ha hecho plantearme las actividades de otra manera, no dejarme arrastrar por la inercia de los cursos y elaborar nuevos materiales.” N.L. sigue en la línea diciendo: “También me ha interesado profundizar en la distinción entre ejercicios y problemas. Una conclusión clara es que los segundos favorecen mucho más la autonomía y madurez de los alumnos que los primeros.”
Los nuevos enfoques para abordar los trabajos prácticos más allá de la práctica de laboratorio tradicional. Muchos de los compañeros se han percatado de que el trabajo práctico no sólo es posible hacerlo en el laboratorio, sino que puede realizarse utilizando otros muchos recursos como experiencias caseras, de aula o simulaciones. Pero independientemente del lugar en el que se realice, lo importante es remarcar el procedimiento con el que se lleva a cabo: o restringido a trabajo manipulativo o abarcando todas las capacidades que conlleva una investigación, desde la elaboración de hipótesis y diseño experimental hasta la discusión de resultados y elaboración de conclusiones. M.C.G. comenta: “En este curso he aprendido que muchas veces no es necesario tener el laboratorio de la Nasa para hacer experimentos, que hay multitud de prácticas que se pueden hacer con cosas de andar por casa y que son llamativas y sirven para explicar conceptos que a lo mejor en modo teórico quedan un poco cojos”. A.M. dice: “hoy mismo me he sorprendido a mí mismo proponiendo a mis compañeros de departamento una práctica casera como trabajo de vacaciones para los alumnos.” N.L. se refiere al hincapié que poníamos los tutores en que realizaran las experiencias que tenían que comentar, al escribir: “También ha quedado claro lo inadecuado de diseñar experiencias sobre el papel sin realizarlas.”
El apoyo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en el aula. También han reseñado mayoritariamente la utilidad que supone, para su práctica diaria, saber hacer su propia Web o Blog, así como la facilidad con la que la han realizado. Asimismo han valorado mucho el uso de las simulaciones y la disponibilidad de recursos didácticos que proporciona Internet, con los que han realizado, como ya hemos indicado, bancos de datos compartidos entre todos, para su posterior uso personal. Dos comentarios, al respecto, son el de Y.A.: “Lo más importante es que me he dado cuenta de que realmente, con un poco de empeño, no es tan difícil introducir las TIC en nuestro trabajo diario, sólo tengo que pararme y pensar qué es más útil o qué puedo hacer con lo que tengo”; y el de L.F.H.: “Me ha gustado mucho el aprender a crear una web personal, le veo muchísimas posibilidades, la más importante para mi es la comunicación con los alumnos que te brinda la página para realizar actividades.”
Por último, se realiza un proyecto final donde deben desarrollar una tarea para los alumnos, de acuerdo a un esquema de trabajo, en la que se apliquen algunos de los contenidos del curso. Aunque en este momento ya están un poco cansados por el esfuerzo realizado, la inmensa mayoría valora este proyecto muy positivamente porque les permite hacer un trabajo para el aula aplicando algo nuevo de lo aprendido. C.R. comenta: “En el Proyecto final he intentado recoger lo aprendido. La verdad es que yo ya sentía la necesidad de que hay que explicar los contenidos aplicándolos a problemas de la vida real, pero ahora soy más consciente de ello”. M.E.G. nos cuenta que “El trabajo final lo he utilizado con un grupo de alumnos a los que les gusta poco estudiar, y que realmente se lo han pasado en grande con la experiencia y que de otra forma no sé si hubieran entendido el concepto de presión.”
Los aspectos que los participantes consideran mejorables se centran en el exceso de trabajo y en el escaso reconocimiento oficial al respecto: la certificación del número de horas no es acorde al trabajo realizado. También comentaban, sobre todo en las primeras convocatorias, que los plazos de entrega de las actividades eran cortos. En consecuencia, año tras año se han ido alargando y, aunque ahora algunos siguen considerándolos escasos, en la última evaluación la mayoría indica que ve los plazos de entrega adecuados. En casos puntuales comentan que estos cursos deberían ser obligatorios para todos los profesores para poder formar equipos, en los centros, trabajando en la misma línea.
Este curso se ha impartido en su formato on-line durante cinco cursos académicos consecutivos, incluido éste. Los cuatro primeros cursos se distribuyeron los participantes en dos grupos de profesores, tutelados por Miguel Ángel y por mí, habiéndome quedado yo sola en este último curso debido al problema de salud de nuestro gran profesor, amigo y compañero de trabajo.
Quiero incidir en el papel de Miguel Ángel en el curso. Por un lado, en su aportación en el aspecto técnico por su dominio de las TIC y su conocimiento de la Didáctica de las Ciencias. Por otro lado, en el aspecto personal, por su amor por la enseñanza, su carácter afable, sencillo y cercano, con aportaciones continuas.