PINO

Origen: Existen más de 110 variedades en el mundo. Es un género de plantas pertenecientes al grupo de las coníferas y dentro de este, a la familia de las Pinaceae, que presentan una ramificación frecuentemente verticilada y más o menos regular.

Son nativos del Hemisferio Norte. Siete especies son nativas y originarias de la península ibérica y zonas aledañas y han sobrevivido y desarrollado desde tiempos remotos.

Características más importantes: Los tallos tienen fisuras y su corteza es de color marrón grisácea.  La parte superior de las hojas tiene un color rojizo y anaranjado. Hay que destacar que la ramificación es más completa en los ejemplares que son jóvenes, ya que conforme el árbol crece, sus ramas más bajas se van perdiendo hasta quedar solo el tronco.

Época de plantación: Es preferible evitar el invierno y el verano, ya que las temperaturas extremas probablemente dificultarán que crezca de manera saludable. 

Época de floración/fructificación. Cuidados y mantenimiento: Toleran cualquier tipo de tierra.

A algunas especies hay que darle una poda de formación durante los primeros años de crecimiento para que adopte la forma adecuada.

El único problema que podría llegar a presentar es el ataque de la Oruga procesionaria del pino. La mejor época para luchar contra ella es de finales del invierno hasta principios de la primavera.

Su nombre de debe a que proliferan muy rápido y se mueven formando largas filas como en la procesiones. Aparecen con la subida de las temperaturas y la inhalación de los finos pelos de la oruga, que es donde oculta su veneno, puede producir desde urticarias hasta reacciones alérgicas graves.

Usos: La madera del pino  es ligera y flexible. Se puede utilizar en carpintería y en estructuras, en particular, en la construcción marítima,también se utiliza para la fabricación de pasta de papel o para obtener resina.

Es prácticamente una especie dominante en las repoblaciones por su gran capacidad de sobrevivir en terrenos poco fértiles. Son capaces de salir adelante en tierras devastadas por incendios o arenosas e incluso en parcelas degradadas por un aprovechamiento agrícola exagerado. Necesita poca agua y poco alimento.

Lo más destacado es que mientras crece su pinaza va fertilizando el terreno, ya que sus agujas crean un manto sobre el suelo que impide que nazcan especies oportunistas que se aprovecharían de la materia orgánica que él va depositando sobre el terreno.

Elaborado por: Yanira Cabezón Medina.