Anne Sexton

El beso

Mi boca florece como un corte.

me han agraviado todo el año, tediosas

noches, sólo brutos codazos en ellas

y cajas delicadas de pañuelos gritando ¡llorona,

llorona, estúpida!


Hasta ayer mi cuerpo era inútil.

Ahora se está rompiendo por sus picos y esquinas.

Está rompiendo las piernas de la vieja Mary*, nudo a

nudo

y mira ─ ahora está todo invadido por esos rayos

eléctricos.

¡Zumba! ¡Una resurrección!


Érase una vez una barca, toda de madera

y sin tarea, ni agua salada debajo

y necesitada de alguna pintura. No era más

que un montón de tablas. Pero tú la izaste, la aparejaste.

Ella fue elegida.


Mis nervios están encendidos. Los oigo como

instrumentos musicales. Donde había silencio

tocan sin cesar los tambores, las cuerdas. Tú lo hiciste.

La obra de un puro genio. Cariño, el compositor ha

penetrado

en el fuego.


*Mary Gray Staples Harvey, madre de Anne, murió de cáncer en 1959.
Causa por la que también murió su padre, lo que aumentó su depresión.