El primer paso para iniciar un trabajo investigativo es tener clara tu necesidad de información, es decir, saber qué es lo que no se sabe. Escribe en un procesador de texto cada una de las preguntas con las que vas a orientar tu búsqueda de información. Esta es una actividad inicial para que, si no tienes la pregunta claramente expresada, puedas analizarla y revisarla. Clasifica cada una de las preguntas según los dos tipos expuestos: globales o de grieta, y para las de éste último tipo, intenta identificar los componentes descritos.
Ya sabes que para tratar de responder a las preguntas globales te puedes dirigir a un diccionario o a una enciclopedia, o a un manual o texto básico sobre el tema, los cuales puedes localizar mediante el catálogo de una Biblioteca. Además, también puedes consultar con un(a) bibliotecario(a) o un(a) experto(a) que conozcas, para obtener otra información que te aclare el asunto.Pero si en este ejercicio logras elaborar una o varias preguntas de grieta, seguramente deberás proceder a elaborar una estrategia de búsqueda para tener claro cómo y dónde encontrar la información que te permita obtener una respuesta pertinente y relevante.Después de completar este ejercicio, selecciona la pregunta de grieta que define tu necesidad de información, e identifica sus componentes con los cuales iniciarás el diseño de tu estrategia de búsqueda de información especializada.