Sir Arthur Wellesley

Sir Arthur Wellesley, Duque de Wellington

El militar británico fue el azote de los Bonaparte. Derrotó a José I, el rey intruso, en Vitoria y a Napoleón en Waterloo

Sir Arthur Wellesley, primer duque de Wellington, nació en Dublín en 1769, unos meses antes que Napoleón. Procedía de una familia noble. Su padre fue el primer conde de Mornington y su hermano mayor, que heredaría el condado de su padre, creó el marquesado de Wellesley. Además, dos de sus otros hermanos serían además Barones, de Maryborough y de Cowley.

La familia de Wellington decidió que el joven se dedicara a las armas. Y así fue. Tras su formación militar en Inglaterra, Bélgica y Francia fue elegido miembro independiente del Parlamento con funciones de enlace con la Cámara Irlandesa de los Comunes. Ascendió en el escalafón militar y luchó en los Países Bajos y en la India donde fue nombrado Gobernador de Seringapatam y Mysore. A su regreso a Europa, fue elegido representante en la Cámara de los Comunes y más tarde investido consejero de la corona. Además, sirvió como Secretario Jefe para Irlanda antes de navegar hacia Europa para participar en las Guerras Napoleónicas. Durante la Guerra de la Independencia Española, llegó a ser Comandante en Jefe del Ejército Británico y a ejercer dos veces el cargo de Primer Ministro del Reino Unido.

La Guerra de la Independencia

Wellington comandó las fuerzas aliadas, se midió a los mariscales bonapartistas -Junot, Masséna, Soult, Marmont y Jourdan-, derrotó al ejército francés en las batallas de Lisboa, Talavera (1809), Ciudad Rodrigo y Arapiles (1812), y logró finalmente expulsar al ejército napoleónico de España, tras la Batalla de Vitoria, acción por la que fue ascendido a Mariscal de Campo.

En la Llanada Alavesa, el duque de Wellington tuvo bajo su mando a cerca de 80.000 soldados formados por la fuerza angloportuguesa y el Ejército Español, y cerca de 100 cañones. La tropa se dividió en cuatro columnas. La columna derecha, cruzaría el río Zadorra en la Puebla de Arganzón para atacar la posición francesa en los Altos de la Puebla para caer sobre Subijana de Álava.

Las dos columnas centrales estaban a las órdenes de Wellington y sumaban 30.000 hombres. Su cometido sería esperar en los alrededores de Nanclares hasta que la columna derecha tomara los Altos de la Puebla, lo que les permitiría cruzar el Zadorra sin dificultad y atacar de forma frontal el centro de la posición imperial. Por último, la cuarta columna avanzaría hacia el noreste y bloquearía la retirada francesa por el Camino Real que llevaba a Bayona, atacando el extremo derecho de la línea francesa situado en los pueblos de Gamarra Mayor y Gamarra Menor.

Tras la Batalla de Vitoria

Tras el éxito de la campaña alavesa, el duque de Wellington llegó incluso a invadir el sur de Francia, junto con un cuerpo de ejército español, antes del acuerdo de paz entre la España de Fernando VII y del nuevo rey de Francia Luis XVIII en julio de 1814.

Entonces le llegarían los reconocimientos. Fue nombrado vizconde de Talavera, Duque de Ciudad Rodrigo y grande de España. Fue recibido como un héroe en Inglaterra, y comandaría más tarde las fuerzas aliadas en la batalla de Waterloo. En la localidad belga, Wellington derrotó al propio Napoleón tras lo cual, el emperador fue deportado permanentemente a la isla de Santa Elena. Acabada su exitosa vida militar, se dedicó a la política y fue primer ministro por el partido 'Tory', en dos ocasiones, ministro de Exteriores, y después ministro sin cartera y Jefe de la Cámara de los Lores. Wellington se retiró de la vida política en 1846, aunque retuvo su puesto de Comandante en Jefe del ejército. Murió en 1852 y fue enterrado en un sarcófago en la Catedral de Saint Paul. Fue una de las personalidades de la historia europea del siglo XIX.

La mansión londinense del duque de Wellington, denominada Apsley House está abierta al público como museo y exhibe numerosos regalos que recopiló, obras de arte y objetos de lujo, obsequiados por varios gobiernos y casas reales.

El Ayuntamiento de Vitoria, con la creación del barrio de Lakua, bautizó una calle con el nombre del militar británico. También cuenta con una pequeña calle en Talavera de la Reina. En honor a Wellington se erigieron varias esculturas en ciudades británicas incluida una ecuestre, en 1846, frente a su antigua mansión de Apsley House de 40 toneladas y 10 metros de altura. Debido a sus dimensiones fue trasladada en 1884 a Aldershot, en el condado de Hampshire, a unos 60 kilómetros al suroeste de Londres, donde permanece cerca de la iglesia de la guarnición real.

El monumento a la Batalla de Vitoria, levantado entre 1913 y 1916 en la Plaza de la Virgen Blanca de la capital alavesa, con motivo del primer centenario de los hechos, cuenta con una imagen del duque de Wellington. El escultor Gabriel Borrás y Abellá realizó la obra en piedra y bronce y situó al militar británico, representado a caballo en bronce, en la zona media del monumento en plena carga contra las tropas imperiales.

El duque de Wellington, en un retrato pintado por Francisco de Goya. Cuadro expuesto en el National Gallery de Londres.