La edad de la adquisición es muy conocida como el factor más importante de la adquisición de una segunda lengua (ASL) que, según unos, puede afectar el aprendizaje de la segunda lengua positivamente o negativamente (Deng & Zou, 2016; Muñoz, 2008; Mayberry & Lock, 2003). Con 1 de 5 personas en los EE.UU. adquiriendo una segunda lengua, la facilidad de hacerlo se convierte en un tópico importante (Cis.org). Sin embargo, una opinión creciente en la comunidad científica es que la edad de adquisición no es tan importante como pensábamos con otros factores contribuyendo a la ASL (Shi, 2010; Johnston, 2002; Bialystok, 1997). Entonces, con los dos lados apoyados parecen que los resultados son caóticos pero, algunos patrones emergen mientras que analizamos estudios a corto plazo contra al largo plazo. Sin embargo, todavía queda una gran cantidad de ambigüedad y por lo tanto, aquí analizamos los efectos de la edad en adquirir una segunda lengua para decir si la edad tiene una influencia en la ASL.
Para entender los efectos de la edad en la adquisición de una segunda lengua, al principio, es necesario entender la magnitud del efecto que la edad tiene en la ASL y que son los enfoques en que se rodean.
El pensamiento tradicional en la investigación sobre la ASL es que el menor se aprende la lengua, el mejor se adquiere la lengua (Deng & Zou, 2016; Muñoz, 2008; Mayberry & Lock, 2003). Es decir que los jóvenes pueden adquirir la segunda lengua mejor que los adultos. Como un resultado de estudios a largo plazo, aprendimos los jóvenes son mejores en un área crítico, el logro final donde sólo los aprendices jóvenes pueden lograr casi proficiencia nativa en la segunda lengua (Larsen-Freeman & Long, 2014) Sugiere que la complejidad de aprender un segundo idioma es demasiado más para los adultos aunque ellos tienen una capacidad cognitiva mejor que los niños (Deng & Zou, 2016). Este resultado viene de la calidad y la cantidad del input un joven tendrá en comparación con un adulto. Éste es significado y suficiente para crear mayor capacidad de adquisición en el más joven aprendido a través del aumento de entrada que conduce a un mayor reconocimiento de la lengua y la producción (Muñoz, 2008; Mayo, Florentine, & Buus, 1997).
Comenzando recientemente, hubo un cambio en el pensamiento de cómo la edad afecta la ASL refiriéndose específicamente a como la edad no es el único factor que la influye (Shi, 2010; Johnston, 2002; Bialystok, 1997). En general, lo que apareció es que los mayores tienen dominio sobre la morfología y la sintaxis más temprano que los jóvenes (Laresen-Freeman & Long, 2014). Sin embargo, la edad no es el factor responsable de esto. En cambio, la alta cognición y el fondo lingüístico más complejo (como relaciones pueden hacer entre lenguas) de los adultos contribuyen a la tasa de adquisición más rápida (Shi, 2010; Bialystok, 1997). Esto es evidente en los estudios de corto plazo donde los adultos adquieren la segunda lengua más rápidamente que los niños y además, los niños más viejos adquieren la segunda lengua más rápidamente que los niños más jóvenes también (Laresen-Freeman & Long, 2014).
Los métodos principales usados para investigar los efectos de la edad en ASL enfocan en la edad del inicio, la duración del uso, y la proficiencia (Philp, Borowczyk, & Mackey, 2017; Nikolov & Djigunovic, 2006; Oyama, 1976). Los dos métodos analizan la ASL desde una perspectiva de corto plazo o de largo plazo.
De un lado, los estudios de corto plazo duran desde una entrevista hasta unos pocos meses y enfocan en una parte de la ASL y la proficiencia y por lo tanto, solo se ve los cambios que ocurren rápidamente en vez de los procesos a largo plazo (Larsen-Freeman & Long, 2014; Oyama, 1975). Este método es útil para apoyar el enfoque holístico porque demuestra el progreso rápido de la adquisición de adultos en comparación con los jóvenes.
De otro lado, los estudios de largo plazo analizan todo el proceso de la ASL y duran unos meses hasta años (Philp, Borowczyk, & Mackey, 2017; Muñoz & Singleton, 2011). El enfoque principal es el resultado de la ASL y no los fluctuaciones que pueden ocurrir durante el proceso. Por lo tanto, el hecho que los niños tienen dominio sobre los adultos es muy parecido al fin del proceso porque su proficiencia es superior. (Larsen-Freeman & Long, 2014).
Con dos métodos que parecen exclusivos, vienen teorías contrarias cuales producen resultados no conclusivos porque los dos faltan incluir el otro y, además de esto, otros factores que pueden tener un efecto en la ASL. Es decir que el método de corto plazo falta a predecir o contar por lo que pudo o puede pasar afuera de su tiempo de estudio cuando el método de largo plazo falta a reconocer patrones de corto plazo que ocurren durante los estudios del largo plazo. Con un pensamiento así, llegamos a teorías divergentes que no resuelven la cuestión de cómo la edad afecta la ASL.
Es parecido que todavía la comunidad científica está incierta de los efectos de la edad en la ASL, especialmente al extenso. De un lado, el enfoque holístico dice que lo adultos tienen superioridad que los jóvenes por su pensamiento pragmático y mayor nivel de conciencia. Sin embargo, el aprendizaje más rápido de los adultos es limitado, porque sólo refiere a la morfología temprana y la sintaxis y desapareciendo después del aprendizaje temprano. Éste es evidente cuando los adultos más jóvenes superar continuamente de los adultos mayores incluso en estudios a corto plazo (Seright, 1985). Entonces, aunque los adultos pueden adquirir una segunda lengua más rápidamente que los niños en la mayoría de los estudios a corto plazo, sus ventajas demuestran no ser duraderos en los estudios a largo plazo. Por lo tanto, aunque la adquirió inicial de la segunda lengua depende de la edad solamente (visto cuando los adultos adquieren ciertas partes de la lengua), puede ser considerada una de los factores más importantes en referencia a la proficiencia y la longitud de la segunda lengua adquirida.
Sin embargo, debido a los estudios contradictorios especialmente en referencia a los métodos usados, resta demasiada ambigüedad. Para resolverlo, hay que implementar estudios que investigan la edad como un factor a corto plazo y a largo plazo al mismo tiempo para resolver los enfoques opuestos. Además, en vez de solo enfocando en el cambio funcional de la edad en la ASL, también debemos investigar más como la edad afecta la estructura física del cerebro para ver si esto danos la luz en los efectos de la edad en la ASL (Wattendorf & Festman, 2008).
Hoy, todavía hay mucha ambigüedad acerca de si la edad tiene un impacto significo en la ASL. Por mayor parte, creemos que esta incertidumbre viene de los estudios contradictorios (los a largo y corto plazo) que utilizan métodos que operan exclusivamente y por lo tanto, tenemos dos teorías divergentes. Para resolver la ambigüedad, necesitamos un método que incluye la ASL en total pero con más detalles sobre las fluctuaciones que ocurren durante el proceso. Entonces, aquí discutimos dos métodos que investigadores están usando para minimizar la ambigüedad: el uso de la neurobiología y los estudios a caso.
Al principio, el estudio de la neurobiología en términos de la adquisición de una segunda lengua no relaciona con la duración del estudio (como los estudios de corto y largo plazo) sino que los resultados físicamente que resuelven de los procesamientos a largo plazo, aquí la ASL. Unas maneras más fáciles y comunes para estudiarlo es el uso de varios tipos de imágenes del cerebro. Por una técnica así, es posible que el cambio físico refleja un cambio de función y por lo tanto, pueda dar la luz en un aspecto, que por mayor parte no es estudiado, de cómo la ASL es afectada para la edad de adquisición (Lamm, Bauer, Vitouch, & Gstattner, 1999; Parks et al., 1988).
Un ejemplo del uso de la neurobiología en el contexto de la edad de ASL es un estudio de Wattendorf & Festman (2008) donde repasaron imágenes del cerebro de los bilingües tempranos y más tardes por el uso de voxel-based morphometry (VBM), un tipo de imagen del cerebro, de participantes que aprendieron la segunda lengua antes (participantes llamados temprano) o después (participantes llamados tardes)de 6 años cuando ellos estaban haciendo diversas tareas de las segundas lenguas.
Los resultados dijeron que había una diferencia fiscalmente entre los tempranos y tardes bilingües en el giro frontal inferior izquierdo que es la parte en el cerebro que es responsable de procesamiento sintáctico, generación de palabras y generación de frases (Wattendorf & Festman, 2008). Entonces, por un estudio así y otros como Mechelli et al. (2004), vemos un cambio físico en la parte del cerebro donde estos procesamientos ocurren y se podría asumir que también hay cambios funcionales en los procesamientos, las funciones y/o los outputs relacionados (Figura 1).
Otra solución para resolver la ambigüedad es utilizar estudios de caso para evaluar procesos a largo plazo con más detalles de los aprendices de la segunda lengua. Muchas investigaciones habían hecho para investigar la ASL en general (Hendrikx, Van Goethem, & Meunier, 2016; Plonsky & Gonulal, 2015) pero una investigación por Donna Lardiere estudió, por unas de las primeras veces, una bilingüe tarde que se llamaba Patty, un adulto chino inmigrante que aprende inglés en los estados unidos, específicamente (Lardiere, 2017).
Aunque este estudio no enfoco en las diferencias entre los bilingües tempranos y tardes, podemos usar la cantidad de detalles sobre la bilingüe tarde para comparar el conocimiento que ya tenemos sobre los bilingües tempranos. Además, si reprodujeramos este estudio con un bilingüe temprano, podríamos comparar los detalles de cada estudio de caso y por lo tanto, evitar los métodos que operan exclusivamentes.
Con un estudio así, tenemos detalles específicos de un proceso que ocurren a largo plazo. Nos da los resultados una perspectiva inclusiva que los estudios a largo plazo y a corto plazo no nos da.
En total, por el método de neurobiología, podemos ver que hay una diferencia en el cerebro cuando una segunda lengua se adquiere más tarde de que la madurez temprana, ¿pero por qué? Además, por el estudio a caso podemos ver más detalles que los estudios a largo plazo no incluye sino con una perspectiva sobre la ASL en total. Todo esto no pudimos ver con los métodos pasados. Por lo tanto, con la nueva perspectiva que viene con técnicos así, ¿qué más podemos aprender? Si seguimos investigar como la edad afecta la ASL en maneras así, podríamos ser más cercanas a contestar la cuestión sin crear más ambigüedad.
La edad de la adquisición es muy conocida como un factor importante de la adquisición de una segunda lengua y hay muchos estudios que enfocan en factores diferentes con la edad. Con los dos enfoques, los a largo y corto plazo, hay mucha ambigüedad acerca de si la edad tiene un impacto significó en la ASL porque los enfoques son contradictorias y operan exclusivamente. Para minimizar la ambigüedad, puede usar el método de neurobiología que nos da un aspecto diferente. Este método muestra hay una diferencia en el cerebro cuando una segunda lengua se adquiere más tarde de que la madurez temprana. Entonces, con métodos nuevos como la neurobiología, podríamos ser más cercanas a unas respuestas más concretas en como la edad afectar la adquisición de una segunda lengua.
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