Los días que hay que amar

Pienso que hay días

de todo salir mal:

las tonterías

te vienen a buscar.

Pienso que hay días

que son de falso pie;

pienso que hay días

vestidos al revés.

Allí te hieres

donde es terrible herir;

allí te mueres

donde debes vivir.

Pienso que hay días

en que es mejor usar cerveza fría

para bajar la sal.

Pienso que hay días

que son como canción

de todavía,

sin causa ni razón.

Pienso que hay días

que son de desechar;

pienso que hay días

que es mejor olvidar.

Y sin embargo

hay días en que el sol

resulta un barco

paseando el corazón.

Pienso que hay días

que no dejan lugar a tonterías:

los días que hay que amar.