Cartulina grande.
Rotulador para escribir los números.
Frutos.
Castañas.
Flores.
Piñas pequeñas.
Piñas grandes.
Ramas pequeñas.
Ramas grandes.
Hojas pequeñas.
Hojas grandes.
Palos.
Nosotras hemos elegido estos materiales, cada uno es libre de elegir los que más le gusten. Incluso seguir con la numeración.
desarrollo de la actividad
En ocasiones, es compleja la enseñanza de los números de una manera didáctica y divertida para los más pequeños. Se trata de una tarea que requiere ingenio y creatividad por parte de los educadores, ya que captar la atención de los niños por el mundo número es todo un desafío. Sin embargo, una estrategia práctica para la enseñanza es la incorporación de elementos de la vida cotidiana de los niños en las tareas de aprendizaje.
Por este motivo, podemos hacer uso de materiales reciclados que encontramos en el entorno. Por ejemplo: ramas, palos, piñas, flores, hojas o semillas. Al integrar estos objetos de la naturaleza en las lecciones de números, ayudamos a crear una conexión entre el aprendizaje y las vivencias de los niños. Gracias a esto, ayudamos a comprender y asimilar mejor los conceptos matemáticos.
Para realizar esta actividad, serán necesarios elementos naturales en distintas cantidades. Por ejemplo, podríamos distribuirlos de esta manera:
1 fruto
2 castañas
3 flores
4 piñas pequeñas
5 piñas grandes
6 ramas pequeñas
7 ramas grandes
8 hojas pequeñas
9 hojas grandes
10 palos
Una vez recolectados los materiales que vamos a usar, en una cartulina escribiremos los números. Nosotras decidimos hacerlo del 1 al 10, pero puede trabajarse hasta el número deseado. En el caso de no querer usar cartulina, también pueden imprimirse los número en grande y pegarlos en el suelo. El objetivo principal es que los niños sean capaces de asociar los números a las cantidades.
Por ejemplo: si ven el número 6, sepan que deben colocar en el espacio del número, un total de 6 ramas pequeñas.