Folios o cartulinas de colores.
Pegamento para pegar las hojas.
Hojas de diferentes colores y tamaños.
Papel de plastificar para poder prensar y formar el marcapáginas.
desarrollo de la actividad
Inculcar el hábito de la lectura es complicado, pero necesario. Debemos saber cómo motivar a los alumnos para que lean y sientan la necesidad de interesarse por el mundo de los libros. Un mundo donde pueden desarrollar su imaginación y viajar por diferentes lugares.
Es una tarea muy sencilla, simplemente hay que repartir papeles o cartulinas de colores (a ser posible, ya recortadas en forma de marcapáginas) y unas cuantas hojas coloridas y de diferentes tamaños. La cuestión es que deben pegar estas hojas en el papel y, finalmente, la maestra las debe plastificar. Hay total libertad en la creación de esta manualidad, la única condición es que deben usar materiales reciclados. Es una buena manera de enseñar a los alumnos que aquellos objetos que no queremos pueden tener un segundo uso y ser útiles para crear verdaderas obras de arte.
Con esta actividad, ayudamos a que los niños se sientan más animados y tengan ganas de leer un libro. A los alumnos, todo lo que hayan producido ellos mismos les motiva aún más, por lo que esta actividad es perfecta para un tema tan delicado como el de la lectura.