Revolucion Industrial

Revolución Industrial.

Factores previos

La revolución industrial es uno de los cambios más profundos de toda la historia de la humanidad, no se lo debe ver sólo como un cambio en las formas productivas. Ya que se produce un cambio en las estructuras sociales y políticas, da lugar a un nuevo sector social y a ideologías que representan las inquietudes del proletariado.

Pero para que lo que se conoce como Revolución Industrial haya ocurrido se deben haber dado un conjunto de condiciones económicas y sociales que abrieran el camino para el crecimiento productivo.

Inglaterra es el primer país donde se produce la revolución, no es casual que haya sido este país. ¿ Qué había ocurrido en Inglaterra para que se produjera una revolución industrial?

Para comprender este importante hecho, es necesario remontarse brevemente a la historia de Inglaterra, un caso de absolutismo distinto, con mucho menos peso de la Iglesia católica que en los otros estados europeos, y una gran influencia del anglicanismo, religión protestante que no condena la riqueza como forma pecaminosa.

Desde el punto de vista estrictamente económico, Inglaterra presenta formas productivas atípicas para las formas que se estaban practicando en toda Europa. Y sobre este punto merece ser mencionada la economía doméstica o familiar, los comerciantes distribuían a las familias materias primas , y éstas las manufacturaban para la venta comercial. Los historiadores coinciden en ver en esta forma, un antecedente claro de organización del trabajo, porque a medida que avanzaba la economía el comerciante no sólo proporcionó materias primas sino que también maquinaria para aumentar la producción, cuando se habla de maquinaria en este período( s. XV y XVI) se está hablando de telares manuales. Por ejemplo Gran Bretaña abastecía ya en 1500 a más de la mitad de la población con la producción interna, al existir un aumento dela producción los precios en el mercado bajaban. Fue en la producción textil dónde más se desarrolló el sistema a “domicilio”, por tanto no es casual que la primer fase de la revolución industrial se de en la fábrica textil.

Pero estos cambios no pueden ser entendidos tampoco sin la comprensión de las transformaciones que se venían dando en la agricultura. Mientras Europa sufre los períodos de malas cosechas y por ende de hambrunas Inglaterra para el siglo XVII, baja notoriamente las crisis de subsistencias, estos cambios son conocidos como “revolución agrícola” .

La revolución agrícola comprende una serie de cambios: técnicos y en la propiedad de la tierra.

Los cambios técnicos están dados por una mejor explotación de los campos, más específicamente se sustituye el barbecho por el cultivo rotativo, esto no agota la tierra dando más años de cosechas y mejor producción. Por otra parte comienzan a ser utilizados abonos naturales de origen animal que no erosionan la tierra y dan mayor productividad. El uso de plantas como maíz y papas , cambió la alimentación del campesinado ingles del siglo XVII, y además extendió las tierras cosechables, porque son cultivos que crecen en territorios arenosos y con poco cuidado.

En cuanto a la propiedad , al ser rentable la cosecha de productos agrícolas los terratenientes y burgueses comienzan a cercar sus campos y a reclamar a la corona para el cercamiento de las tierras comunales, se da un claro avance de la propiedad privada motivada por el comercio externo e interno.

Estos cambios permiten afirmar entonces que gracias a la revolución agrícola se pasa de una economía de autoconsumo a una economía apuntada al mercado. Conjuntamente a esto hay cambios en la mentalidad del terrateniente, no es el terrateniente típicamente europeo que vivía de sus campesinos, sino que tiene mentalidad empresarial, preocupado por el mercado, por los conocimientos técnicos que aumenten su producción.

No puede dejar de mencionarse el papel de Inglaterra como la gran nación comerciante de Europa de los siglos XVI, XVII y XVIII. Fue un país que se enriqueció gracias al mercado esclavista prestado a las empresas comerciales británicas, otra gran fuente de entrada era el comercio de contrabando que practicó Inglaterra debido al monopolio comercial que imponía España para toda América. Y sobretodo Inglaterra aprovechaba mejor que cualquier otro estado la acumulación de capital, por eso es que Londres se convierte en el principal centro financiero de todo el mundo en el siglo XVII.

La “Revolución Gloriosa” de 1688, había permitido a Inglaterra en el terreno político abrir el camino a la burguesía, que se va a ir enriqueciendo progresivamente durante todo el siglo XVII.

Todos estos cambios generan para Inglaterra en el mercado exterior, la demanda de productos manufacturados, acceso a materias primas para el desarrollo de la industria interna, crear un volumen de capital capaz de financiar el desarrollo industrial.

Todos estos factores a su vez generan una explosión demográfica sostenida sin precedentes, a partir de 1740 las hambrunas habían descendido notoriamente.

Todos estos elementos son de fundamental importancia para comprender la revolución industrial, porque se crearon una serie de condiciones aptas para la inversión en maquinaria, un crecimiento de la población que sería útil para la obtención de mano de obra.

La Primer etapa de la Revolución Industrial. 1760-1840.

A partir de 1760 se introducen nuevas tecnologías en las fábricas que generan una explosión en la producción, y además un cambio va generando otro.

Las primeras innovaciones se dan en los telares, es decir en la producción textil, la introducción de la máquina de vapor, no solo supone un cambio de energía, ya que se pasa de la energía humana a energía del vapor. El inventor es James Watt, que revolucionó las fabricas textiles. La potencia de estas máquinas equivalía a la fuerza desarrollada por 4 millones de caballos o 30 millones de hombres. Había liberado a las fábricas de las dificultades de la energía animal, o las eólicas, que eran inestables ante cualquier contrariedad. Primero la energía de vapor se aplicó a las industrias ligeras o de consumo, luego pasó a la maquinaria pesada, transportes, pero esta última etapa se va a dar recién para 1850.

Como se ve la chispa de la revolución comienza en la industria textil, pero un cambio va a ir generando a otro. Volviendo al tema textil debe decirse que se produce el desplazamiento de la lana por el algodón, el comercio inglés suministraba gran cantidad de algodón y además las propias características del algodón lo hacían más resistente frente a la lana que es más quebradiza. Además la introducción del telar mecánico desplaza totalmente la lana, porque no resistía la fabricación en telares muy rápidos, así Inglaterra invade los mercados con productos derivados del algodón.[1]

Igual o mayor importancia tiene la industria siderúrgica en la revolución industrial, que ya presentaba avances en momentos previos a la revolución, destaca el cambio del carbón natural por el coque, un derivado mineral. La máquina de vapor comienza a utilizarse en las industrias siderúrgicas, con lo que estas industrias pasan a ser fijas, ya que antes eran móviles porque dependían de la producción de carbón natural, es decir de bosques, pero ahora al tener tecnologías la hacen fija.

Con esto explota la industria del carbón, que era utilizado para el hogar, el crecimiento urbano había aumentado la demanda, pero con las fundiciones de hierro el carbón toma un papel preponderante dentro de la economía inglesa. Así el hierro y el carbón se convierten en dos elementos esenciales del desarrollo de la revolución económica, y van a encontrar en la locomotora su principal vía de desarrollo.

Estos han sido los sectores más importantes de desarrollo de la revolución, pero también se desarrollan otros sectores no tan importantes, pero que vale la pena tener en cuenta para ilustrar la profundidad de los cambios. La industria química se desarrolla en gran parte por la industria textil, los mercados exteriores requerían las prendas con colores y elementos químicos para su mejor mantenimiento.

Para la década de 1830, comienza a desarrollarse la fabricación de ferrocarriles, con lo que la demanda de hierro se hace mucho mayor, y otras industrias menores comienzan a recibir demanda ( cuero, vidrio, textil).

Es interesante tener en cuenta la incidencia de estos cambios en la geografía y en la fisonomía de las ciudades, indudablemente aparecen elementos totalmente novedosos, el humo se hace una cosa cotidiana en la vida de las grandes ciudades inglesas, los ruidos de las fábricas, los barrios obreros, y esto se va acentuar mucho más cuando el ferrocarril sea el transporte principal de la industrialización.

Estos cambios económicos también van a tener su incidencia en el aspecto político y social.

Las fuerzas laborales se vieron modificadas por la aparición de la clase obrera: el proletariado. La aparición de hombres que prestan su fuerza de trabajo a cambio de un salario, es la característica esencial de la sociedad industrial. Las condiciones de vida de este primer proletariado son deplorables, la gran demanda de mano de obra da lugar a la formación de barrios donde se agrupan los trabajadores que trabajan más de doce horas diarias, debe tenerse en cuenta que no existe una legislación laboral. Generalmente estos barrios se ubican en los bordes de las ciudades, en los suburbios. Los niños y las mujeres trabajaban, en condiciones dónde no podían sobrevivir por mucho tiempo.

Y como contrapartida de esto se da el ascenso notorio de la burguesía industrial, que se hicieron los dueños de la economía.

Los obreros a comienzos del siglo XIX comienzan a manifestarse en contra de la situación laboral que vivían. Pero hay que distinguir dos tipos de protestas, aquellas realizadas por los artesanos y fabricantes pequeños que se ven desplazados por las fábricas industriales. Son movimientos de escaso contenido político, que ven en la maquinaria a la culpable de su mala forma de vida. [2]Pero en el siglo XIX a partir de lo que se conoce como la “cuestión obrera” van a desarrollar movimientos organizados.

[1] Vale volver a mencionar el papel de Inglaterra en el mundo como una potencia comercial ya que consigue el algodón en grandes cantidades a base del comercio de esclavos. El funcionamiento es. Inglaterra vende esclavos o los intercambia por algodón en zonas algodoneras , por ejemplo el sur de Estados Unidos o Centroamérica.

[2] Esto lo vamos a ver en otras clases. Marxismo, anarquismo.