1997 - CARTA AL PRINCIPE FELIPE

ANTECEDENTES

Su Alteza, el Príncipe Felipe, hasta aproximadamente 1997, era un raro asistente a las corridas de toros. Con ocasión de la publicación de un libro de la periodista, Pilar Urbano, me entero de una anécdota que deja de manifiesto los intentos de Doña Sofía para que sus hijos no asistan a las corridas de toros. Con ese pretexto, le mando una carta apoyando a la Reina. Desde entonces, no hemos vuelto a ver al Príncipe asistir a una corrida. Y no quiero decír, con ello, que haya sido consecuencia de esta carta; pero si que esta carta ha sido un granito de arena más al trabajo de muchos y, sobre todo, del trabajo de Doña Sofía.

Alicante, 7 de enero de 1.997

Alteza Real:

Durante una entrevista realizada en una conocida emisora de radio, la periodista Pilar Urbano contaba la siguiente anécdota, adelantando que no estaba muy segura de ser cierta:

"Una tarde de toros, el Rey, como siempre, animaba a su familia a que le acompañaran a la plaza a presenciar la corrida. La Infanta Elena fue la primera a subirse en el coche, ante la duda de sus hermanos de hacer lo mismo.

Después de mucho insistir, S.M. consiguió que sus otros dos hijos se les unieran.

Se puso en marcha el vehículo y, durante un tramo, la Reina lo persiguió golpeando en los cristales a la vez que gritaba: '¡Esquiroles, no os he educado para esto!'. A lo que el Príncipe Felipe respondió sacando la cabeza por la ventanilla: '¡Tu de esto no entiendes porque eres extranjera!'." (más o menos).

Pues bien; de ser cierta dicha anécdota, permítame que, con todo respeto, le exprese mi más enérgica queja por cuestionar la españolidad de mi Reina, por una memez como la de las corridas de toros.

Espero que no se crea eso de que las corridas de toros son "la fiesta nacional"; sería como creerse que la Cocacola es "la chispa de la vida". ¡Es sólo un slogan publicitario!.

Tenga en cuenta que hay españoles que les gustan las corridas de toros (una minoría según todas y cada una de las encuestas publicadas y que quiera consultar) y españoles que las rechazan (mayoría, aunque silenciosa).

Se que me va ha contar eso de que las corridas de toros dan muchos puestos de trabajo. Sean los que sean, siempre serán menos que los puestos de trabajo que dependen del tabaco y se está haciendo campaña contra su consumo. Y es que la salud de las personas está por encima de los puestos de trabajo y tanto el tabaco como los toros ponen en peligro la vida de las personas.

Se que me va a decir lo de nuestra antigua tradición taurina. Pero por antigua que sea no lo es más que nuestra tradición machista, o belicista, o expoliadora del medio ambiente, o de gobiernos no democráticos, etc. Toda cultura, cuando está viva, cambia, madura; Así, la cultura española actual en nada tiene que ver con la de hace cien, quinientos o mil años.

Muchos esperamos que, al igual que en urbanismo se conservan y recuperan castillos, catedrales, palacios y otros edificios antiguos significativos a la par que se derriban los edificios viejos para dejar paso las construcciones nuevas. Muchos esperamos que, con la entrada del nuevo milenio, se abra paso una nueva cultura española en donde se conserven y recuperen tradiciones de importancia y se incorporen valores nuevos como la democracia, el diálogo, la no violencia, el respeto a la Naturaleza y a los seres vivo que la forman, los derechos humanos, la no discriminación por motivos de sexo, raza, religión, edad, ideología, etc, etc.

Espero y deseo que su Alteza llegue a ser el Rey de todos los españoles, taurinos o no taurinos, o mejor aún, que sea pieza clave y punto de inicio de esa cultura española del siglo veintiuno.

Deseando lo mejor para su Alteza y su familia, le saluda.

José Francisco Cuéllar Junio

ANDA-Alicante /CODA