LA MÁS BELLA NIÑA (1580). Luis de Góngora
Lam
La más bella niña
MI
de nuestro lugar,
hoy viuda y sola
Lam
y ayer por casar,
viendo que sus ojos
SOL
a la guerra van,
FA
a su madre dice,
MI
que escucha su mal:
Lam
Dejadme llorar
MI Lam
orillas del mar.
Pues me diste, madre,
en tan tierna edad
tan corto el placer,
tan largo el pesar,
y me cautivaste
de quien hoy se va
y lleva las naves
de mi libertad.
Dejadme llorar
orillas del mar.
Dulce madre mía,
¿Quién no llorará,
aunque tenga el pecho
como un pedernal,
y no dará voces,
viendo marchitar
los más verdes años
de mi mocedad?
Dejadme llorar
orillas del mar.
En llorar conviertan
mis ojos, de hoy más,
el sabroso oficio
del dulce mirar
pues no se pueden
mejor ocupar,
yéndose a la guerra
quien era mi paz.
Dejadme llorar
orillas del mar.