¿Se han fijado que un signo de prepotencia y discriminación se da en aquellos que creen tener toda la verdad y/ o se sienten mejores que otros/as?
Es lo que lastimosamente solemos contemplar en algunos de los debates políticos en este último tiempo. Particularmente, lo que ha sucedido al interior de los debates de los Constituyentes. Hay un dicho popular que dice “Por la boca muere el pez”, como una manera de descubrir a personas que son intolerantes y se niegan a un verdadero diálogo, y se resisten a reconocer que cada cual tiene algo que decir sobre una realidad.
Pidamos a Nuestra madre María, para que vayamos construyendo una sociedad y ambiente donde la verdad y la comprensión del otro/a sea la base de la convivencia nacional.
María, Madre de los jóvenes, ruega por nosotros.
Recemos la ORACION INICIAL DEL MES DE MARIA
El Papa Francisco nos dice (EG 117).:
“Reconozcamos que una persona, mientras menos amplitud tenga en su mente y en su corazón, menos podrá interpretar la realidad cercana donde está inmersa. Sin la relación y el contraste con quien es diferente, es difícil percibirse clara y completamente a sí mismo y a la propia tierra, ya que las demás culturas no son enemigos de los que hay que preservarse, sino que son reflejos distintos de la riqueza inagotable de la vida humana. Mirándose a sí mismo con el punto de referencia del otro, de lo diverso, cada uno puede reconocer mejor las peculiaridades de su persona y de su cultura: sus riquezas, sus posibilidades y sus límites. La experiencia que se realiza en un lugar debe ser desarrollada “en contraste” y “en sintonía” con las experiencias de otros que viven en contextos culturales diferentes.”
“Acercarse, expresarse, escucharse, mirarse, conocerse, tratar de comprenderse, buscar puntos de contacto, todo eso se resume en el verbo “dialogar”. Para encontrarnos y ayudarnos mutuamente necesitamos dialogar.” (FT 198)
- Los textos del Papa, hablan por sí mismos. La educación al diálogo y a la tolerancia, es un proceso que no termina en la vida. Siempre necesitamos ir más allá de sí mismos, para llegar al encuentro del otro/a.
María, Madre tolerante y cercana:
- Ayúdanos a educarnos en el diálogo sincero por sobre la imposición de nuestra verdad.
María, Madre tolerante y cercana:
- Que nuestras familias sean fuente de comprensión, tolerancia y diálogo cercano y afectuoso.
María, Madre tolerante y cercana:
- Que, en nuestras escuelas, o Centros de educación superior, aprendamos a ser tolerantes y dialogantes, para buscar la verdad.
Estrechar las manos con quienes están más cercanos como signo de disposición al diálogo y tolerancia