En la casilla"¿De qué color es el agua?" había qué pintar en un mural de diez metros al ritmo de la música, que tocaban Fernanda y Tamara.

Tamara inesperadamente se unió a tocar el pandero con Fernanda.

No sabíamos qué estábamos pintando, pero antes de que se terminara el encuentro final juntaron todos los trozos de mural que habíamos estado pintando durante la mañana y los lanzaron algunas familias desde una terraza. Fue súper bonito.