Integración de las tecnologías educativas emergentes
El estudiante maestro integra las tecnologías de la educación en sus prácticas en la sala de clases para apoyar y enriquecer la enseñanza, el aprendizaje y la evaluación de todos(as) los(as) estudiantes así como para promover la comunicación, colaboración, investigación y creación.
Comparto una Experiencia de campo en la que observé el uso de la tecnología en la Escuela Secundaria Montessori Eduardo J. Saldaña y en la que desarrollé una actividad tecnológica la cual fue presentada a los estudiantes. Fue realizada como parte de los requisitos del curso Integración de la tecnología y el uso de la computadora en el currículo del nivel secundario, durante el segundo semestre del año académico 2018-2019.
Con esta evidencia demuestro que he incrementado mi dominio en la integración de la tecnología en el proceso de enseñanza-aprendizaje, que forma parte de esta competencia. Los aprendizajes significativos que obtuve al realizar este trabajo me permitieron incrementar mi dominio de esta competencia. Entre estos aprendizajes significativos destacan los siguientes: la importancia de integrar la tecnología en la sala de clases, visualizar la tecnología como una herramienta necesaria para enriquecer el proceso educativo, y la utilidad que tiene la tecnología como vehículo para promover la comunicación, creación y colaboración. Esta integración es necesaria para lograr llevar el proceso educativo de una manera más interactiva y dinámica.
El Siglo XXI se caracteriza por ser de mucha innovación y constante cambio. Es por ello que nosotros como futuros educadores tenemos el gran reto de ir a la par con lo que el mundo cambiante nos ofrece. Se hace necesario, entonces, reconocer que el proceso didáctico debe ir de la mano con el tecnológico; es decir, es importante el uso de las tecnologías del aprendizaje y el conocimiento (TACs). Estas facilitan el acceso a la información, favorecen la comunicación, estimulan la participación y colaboran en el logro de las metas establecidas. De modo que al utilizar la tecnología en el proceso de enseñanza creamos un ambiente colaborativo, auto dirigido, accesible, flexible, autónomo, interactivo y, sobretodo, muy dinámico. Debo señalar que las TACs van mucho más allá de solo disponer de la tecnología en el ámbito educativo, es saber cómo emplearlas con el propósito de potencializar el aprendizaje y la enseñanza. A su vez, nos permitirán interaccionar con otras culturas para darnos cuenta de que existe una realidad más allá de la que vivimos. Sin duda, educar a nuestros estudiantes con las tecnologías de la información y la comunicación (TICs) es un derecho al cual debemos darle acceso.
Debido a que la historia usualmente suele ser muy confusa para los estudiantes, es por esto que es muy útil buscar la manera más sencilla para explicarla. Por tal razón, presento como evidencia un mapa conceptual sobre la Edad Antigua, que fue creado con la aplicación Coggle, una herramienta muy útil que permite crear mapas conceptuales creativos. Como futura maestra esta aplicación me será de gran utilidad en el proceso de enseñanza porque me permitirá presentar cualquier tema de manera dinámica. También, mediante ella les daré la oportunidad a los estudiantes de visualizar el material de manera más sencilla y fácil; lo que les hará posible aprender rápidamente. Como dice la misma aplicación: “Es la forma más fácil de compartir la información más compleja”. Así que, estoy segura que a los estudiantes les parecerá más interesante la presentación de ciertos temas de esta manera en lugar de las tradicionales. Además, este método es muy útil para aquellos estudiantes que tengan una inteligencia visual-espacial. Claro está, como maestra no solo me enfocaré en este método, sino que emplearé otros con el fin de favorecer las inteligencias múltiples de mis estudiantes. Me propongo el uso constante de las TICs con el fin de promover la comunicación, participación, creatividad, colaboración, investigación y creación de todos mis estudiantes; ya que reconozco que es nuestro deber como docentes buscar la manera proactiva de educarlos para que se desempeñen en un mundo cada vez más globalizado y virtual, lo que hará posible que desarrollen su máximo potencial.