Los términos “assessment” o evaluación son los procesos de recopilación de información que se centran en el estudiantes y es dirigido por el maestro. Existen tres tipos de evaluación; diagnóstica, formativa y sumativa. Como parte de la Práctica Docente realizamos los tres tipos de evaluación. En primer lugar, se realiza una prueba diagnóstica para saber los conocimientos que tiene el estudiante. En mi Práctica Docente esa prueba diagnóstica se realiza acorde con el Plan Educativo Individualizado (PEI) de los estudiantes. Luego al final de la Práctica Docente se vuelve a administrar esa prueba para saber el progreso del estudiante. En segundo lugar, la evaluación formativa que es aquella que se realiza durante un tema. En todas mis clases realizó un assessment donde los estudiantes me demuestren que los objetivos de aprendizaje fueron alcanzados y junto a eso una lista de cotejo. Aquí un ejemplo de una de las listas de cotejo.
Por otro lado, la prueba diagnóstica consta de temas presentados en el PEI. También ha sido uno de los aspectos que he podido desarrollar gracias a la Práctica Docente. Uno de los retos mayores en esta competencia y en la Práctica Docente ha sido el desarrollo de un Récord Anecdótico. El aspecto de determinar qué situación es relevante para colocarlo en un Récord Anecdótico ha sido de los más retante. Más sin embargo, como parte de la práctica he ido mejorando esos aspectos con el apoyo de la maestra cooperadora. También los resultados de los diferentes assessment realizados en la clase me han ayudado reflexionar sobre cómo y de qué manera he explicado ciertos aspectos y si se necesita re enseñanza o refuerzo.
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Nuestra reflexión profesional del dominio de las competencias profesionales tuvo sus fundamentos en la discusión grupal de cada una de ellas, según lo expuesto en la página de carpeta profesional. El texto de la competencia 8 Evaluación del aprendizaje fue desarrollado por la maestra Keylla C Lugo Santiago.
La competencia número 8 se basa sobre la evaluación de aprendizaje. Este es el proceso sistemático por medio el cual emitimos juicio acerca del aprendizaje de los estudiantes a partir de información recopilada y comparada con criterios preestablecidos. Esta recolección se puede completar a través de estrategias de la ubicación, de diagnóstico, de evaluación formativa o sumativa. Todas estas son fuentes variadas acerca del aprendizaje del estudiante. Específicamente, las pruebas de ubicación se realizan para indagar sobre el nivel de dominio de ciertos temas como preparación para la planificación; los instrumentos diagnósticos son implementados por personas capacitadas y certificadas profesionalmente en la identificación formal de necesidades especiales; la evaluación formativa es aquella que se utiliza al final del curso para conocer los impactos de las diversas actividades educativas según realizadas, y; la evaluación sumativa, usualmente, es útil para adquirir datos del aprendizaje global sobre una materia o tema.
La importancia de esta competencia es sumamente grande, pues, gracias a la evaluación podemos ver el progreso y logro de los estudiantes. Saber si están dominando el tema que se está enseñando o si están teniendo alguna dificultad. Debido a la información que recopilamos de las evaluaciones sabremos qué temas reforzar, en qué podemos avanzar y hasta qué estudiantes van a necesitar tiempo extra para cubrir sus necesidades relacionadas en la clase. Utilizamos la evaluación para la toma de decisiones de acuerdo al currículo, la planificación y medir la efectividad de la metodología, la utilización de materiales y assessment que ejecutamos en el semestre. Uno de sus propósitos es confirmar unos niveles de formación y comprobar que se estén desarrollando los conocimientos y competencias adecuados.