Los colectivos inteligentes en tecnología se refieren a la colaboración y coordinación entre individuos y sistemas para lograr objetivos comunes de manera eficiente y efectiva. Estos colectivos aprovechan la inteligencia colectiva, que es la capacidad de un grupo para resolver problemas, tomar decisiones y generar ideas de manera conjunta, superando las capacidades individuales de sus miembros.
Tal y como lo asevera Pierre Levy (2004), los colectivos inteligentes en tecnología se expresan en la teoría de la inteligencia colectiva en la cuál sostiene que la inteligencia no es solo una propiedad de individuos, sino que también puede emerger de la interacción y la colaboración entre ellos. La tecnología, según Lévy, desempeña un papel clave al proporcionar medios para la comunicación y la conexión, permitiendo así la formación de colectivos inteligentes capaces de abordar desafíos de manera más efectiva que los individuos por separado.