Cuando la gente comienza con negocios, suelen hacerlo sonando con los ingresos que este proporcionara y con las esperanzas de ser dueño de su propia casa, trabajando en su propio horario, y ser capaz de poder cubrir todas las necesidades de su familia (y muchos de sus deseos). Muchos empresarios nuevos ven los negocios establecidos que han funcionado durante años, y piensan que el éxito se debe al tamaño de las empresas. Al querer seguir los pasos de las grandes empresas, estos propietarios se ven en la tentación de abrir negocios caros a gran escala.

Mientras que los propietarios de negocios impulsivos a menudo dan pie a su deseo de iniciar a lo grande, los sabios superan esa tentación, y de una manera sabia deciden empezar con poco y crecer después a lo grande. Ellos han desarrollado un sentido de paciencia que les permite comenzar a una escala muy pequeña, pero nunca perder de vista su intención de algún día ser grandes. Con esta perspectiva adecuada, pueden experimentar con sus pequeñas empresas cuando los riesgos son bajos y el costo del fracaso es relativamente pequeño. Ellos hacen pequeñas cosas que conducen a éxitos en pequeña escala porque saben que que al hacer las pequeñas cosas de ahora, será capaz de hacer crecer el negocio a fin de que algún día experimenten el éxito a gran escala.

Sueñe en grande. Tenga grandes expectativas para su negocio, pero asegúrese de hacer las cosas pequeñas primero.