Cuentos 2.0 en vocabulario sXXI

Contar con tantos profesores, enamorados de su quehacer cotidiano, y que, además, tengan ese punto de sentido del humor que hace alquimia en la buena educación , es una suerte para nuestro país.

De la mano de mi buen amigo, Toni Solano, empiezan a llegarme estas peculiares versiones que, hace ya unos años, escribieron un grupo de esos profes que como diría Juan Sánchez Martos...son mi claustro twittero.

Gracias a todos pos esta colaboración .

Comenzamos

Pulgartuito by toni solano

Ahora le toca el turno a Caperucita 2.0. de Juanjo Muñoz

Caperucita 2.0 relato de ficción de Juanjo Muñoz by Mercedes Ruiz

Rapuncel 2.0.1 de @vimpela

Hace algunos años Linda Castañeda y otros lanzaron unos cuentos digitales para niños de hoy y yo adapté uno de mis cuentos favoritos, Rapuncel. En aquellos días yo contaba con un blog en un servidor pequeñito y sufrí el efecto menéame y lo perdí todo. Llevo años queriendo re-escribir esa historia y creo que no tendré mejor forma que empezar una nueva aventura, que cumpliendo un plan atrasado desde hace mucho tiempo. Obviamente, este no es una copia de aquel cuento y no será nunca igual... pero es una versión 2.0.1 de Rapuncel.

Érase que se era, en un país muy tecnológico, nació una princesa en el seno de una familia temerosa de la red. Así que cuando Rapunzel nació, sus padres escondieron ordenadores, smartphones y tabletas para evitar que su preciada princesa tuviera la tentación de sumergirse en internet. Así mientras su princesa fue una niña vivió en un mundo analógico lleno de princesas y libros de cuentos.

Cuando Rapuncel cumplió tres años, sus padres recibieron una carta de los malvados responsables de un colegio recordándoles que su princesa tendría que ir al colegio. Asustados los padres buscaron alguna forma de evitar que las redes sociales llegaran hasta ella. Así que escribieron unos formularios impidiendo que fotos y trabajos aparecieran en blogs y páginas webs. Y la infancia de Rapuncel siguió entre rotuladores, lápices y cuentos.

Pero Rapuncel llegó a la adolescencia y sus compañeros empezaron a hablar a de Eyebook y Fifteen. Rapuncel pidió a sus padres que la dejaran unirse pero ellos, temerosos de sus consecuencias, se lo negaron. Rapuncel lloró y lloró pero un amigo decidió dejarle conectarse con su móvil. Así Rapuncel navegó y consiguió mil amigos, además, empezó a hablar con un príncipe de un lejano reino a través de Eyebook. Rapuncel era feliz, y sus padres, en su ignorancia, también lo fueron.

Y Rapuncel a los quince, empezó a buscar un príncipe azul. Así recibió mil pretendientes pero ninguno era tan interesante como aquel príncipe de un lejano reino que le hablaba de playas infinitas y de alfombras de flores que alfombraran sus pasos. Así que una noche, se escapó por la ventana y se fue a buscar a su príncipe. Pero el príncipe resultó ser un dragón malvado y los padres comprendieron, muy tarde, que esconder a Rapuncel en una torre no había conseguido ocultarla del peligro, como quemar las ruecas no había protegido a Aurora, la bella princesa durmiente de otro reino, sino que tendrían que haberle enseñado a protegerse de cualquier dragón, viniera del lugar que viniera.