6 MENTIRAS DE LA NUTRICION CONVENCIONAL

Post date: Jan 30, 2016 9:38:17 PM

(FUENTE: entrenamiento.com)

En el campo de la nutrición existen muchos mitos que se han ido extendiendo entre la población a lo largo de los años, los cuáles es necesario desmentir con evidencias científicas.

Muchos de nosotros deseamos seguir unos hábitos alimenticios saludables, aunque por desgracia no toda la información que hay disponible es correcta. La nutrición es un ámbito alrededor del cual circulan muchos mitos qué pueden confundir a mucha gente. Ésto puede provocar que muchas personas piensen que están siguiendo hábitos saludables cuando en realidad no es así.

Vamos a enumerar las afirmaciones falsas más populares que han circulando lo largo de los últimos años sobre la dieta convencional, aunque por desgracia esto solo es la punta del iceberg.

1. Los huevos no son sanos

Hay algo los profesionales de la nutrición saben muy bien cómo hacer… y es demonizar alimentos realmente saludables para nuestra salud.

Uno de los peores ejemplos de esto son los huevos, en la medida que resulta que contienen una gran cantidad de colesterol y, por tanto, se considera que pueden aumentar el riesgo de sufrir problemas de corazón. Sin embargo, recientemente ha sido probado científicamente que el colesterol de nuestra dieta no aumenta en realidad el colesterol en nuestra sangre. De hecho, los huevos hacen que aumente principalmente el colesterol “bueno” y no están vinculados a la posibilidad de aumentar el riesgo de sufrir problemas de corazón.

En realidad nos encontramos ante una de las comidas más nutritivas del planeta, pues contienen gran cantidad de nutrientes en grandes cantidades, incluidos los antioxidantes que protegen nuestros ojos.

Además, a pesar de ser un alimento “alto en grasa”, ha sido demostrado que el tomar huevos para desayunar causa una significativa pérdida de peso en comparación con tomar más carbohidratos para desayunar.

los huevos son saludables

2. Las grasas saturadas son malas para ti

Hace varias décadas se decidió que la causa de la epidemia de problemas de corazón estaba causada por tomar demasiadas grasas, especialmente grasas saturadas. Esto se basó en estudios llenos de fallos y decisiones políticas que ya han sido demostradas como completamente incorrectas.

En 2010 se publicó un enorme estudio que analizaba veintiún estudios epidemiológicos prospectivos con un total de 247.747 sujetos. El resultado: no existe absolutamente ninguna relación entre las grasas saturadas y las enfermedades de corazón.

Por tanto, la idea de que las grasas saturadas aumentan el riesgo de sufrir problemas de corazón era una teoría que, si bien no había sido comprobada de ninguna manera, pasó a tenerse como algo cierto dentro de la sociedad. Pero lo cierto es que no existe ningún motivo por el que debas temer comidas como la carne, aceite de coco, mantequilla, queso, etc.

¿son malas las grasas saturadas?

3. Tomar demasiada proteína es malo para tus huesos y riñones

Puede que alguna vez hayas escuchado que una dieta alta en proteínas puede llegar a causar osteoporosis y problemas de riñón. Es cierto que el tomar proteína aumenta la excreción de calcio de los huesos en el corto plazo, pero existen estudios científicos que demuestran que a largo plazo la proteína está asociada a una mejora de la salud de nuestros huesos y un menor riesgo de sufrir una fractura de los mismos.

Además, ningún estudio muestra ninguna relación entre el ingerir mucha proteína con problemas de riñón en personas sanas. De hecho, dos de las mayores causas de los fallos de riñón son la diabetes y la alta presión sanguínea. Resulta que el consumo de proteína mejora ambos factores.

Por tanto, no es que la proteína no sea mala para nuestros huesos y riñones, sino que además nos protege contra la osteoporosis y los fallos de riñón.

La proteína es buena para los huesos

4. Las comidas bajas en grasa son buenas para ti

¿Sabes qué sabor tiene la comida normal cuando le extraes toda la grasa? Bueno, sabe a cartón, de modo que nadie querría comer algo así. Lo cierto es que los productores de comida saben esto y, por tanto, les añaden otras cosas para compensar la ausencia de grasa en el alimento. Normalmente utilizan edulcorantes, tal como azúcar, sirope de maíz algo en fructosa o edulcorantes artificiales como el aspartamo.

Si bien es cierto que los edulcorantes artificiales no tienen calorías, no existen evidencias que demuestren que sean mejor para nosotros que el azúcar. De hecho, muchos estudios muestran una consistente e importante relación entre estas sustancias con enfermedades como la obesidad, síndrome metabólico, problemas de corazón, parto prematuro y depresión.

¿son sanas las comidas sin grasa?

5. Debes hacer muchas comidas pequeñas a lo largo del día

La idea de que debemos hacer muchas comidas a lo largo del día en aras de mantener activo nuestro metabolismo es un mito persistente que no tiene sentido alguno. Es cierto que comer activa nuestro metabolismo ligeramente mientras hacemos la digestión, pero lo que determina la energía que utilizamos en este proceso es la cantidad de comida que ingerimos, no el número de comidas que hacemos.

Esto se ha puesto bajo examen varias veces. Así, varios estudios en los que un grupo de sujetos hacía muchas comidas pequeñas a lo largo del día y otro consumía la misma cantidad de comida pero en menos comida, demostraron que no existía diferencia laguna entre ambos. De hecho, un estudio llevado a cabo en hombres con obesidad demostró que comer 6 comidas al día conlleva una menor sensación de plenitud que hacer tres comidas.

Pero no solo es que comer más a menudo sea inútil para la mayoría de las personas, sino que también puede que sea perjudicial. No es algo natural del cuerpo humano el estar constantemente comiendo. Así, originariamente las personas tendían a comer de cuando a cuando, sin comer con la misma frecuencia que ahora ni mucho menos.

Cuando llevamos sin comer un tiempo, un proceso celular llamado autofagia limpia los residuos de nuestras células. Por ello, el no comer con tanta frecuencia es bueno para nosotros. De hecho, algunos estudios han observado un increíble aumento del riesgo de sufrir cáncer de colon (casi un aumento del 90%) para aquellos que hacen 4 comidas al día en comparación con los que hacen 2 comidas al día.

¿Cuántas comidas debo hacer al día?

6. Las dietas bajas en carbohidratos son malas

Personalmente considero que las dietas bajas en carbohidratos pueden ser potencialmente la cura para los problemas más comunes de salud en las naciones de occidente. De hecho, ha sido demostrado que las dietas bajas en carbohidratos (las cuales han sido demonizadas por nutricionistas en todos los medios de comunicación) tienen bastantes beneficios para nosotros. Estos estudios observaron que estas dietas:

  • Reducen la grasa corporal más que las dietas bajas en grasa, aunque en las dietas bajas en carbohidratos puedes consumir tanta cantidad como quieras.
  • Disminuyen la presión sanguínea significativamente.
  • Disminuyen la cantidad de azúcar en la sangre y mejora los síntomas de la diabetes mucho más que las dietas bajas en grasa.
  • Aumenta el HDL (colesterol “bueno”) mucho más.
  • Disminuye los trigricéridos mucho más que las dietas bajas en grasa.
  • Transforma el colesterol LDL “malo”, en colesterol benigno.
  • Son dietas que son más fáciles de seguir y engancharte a ellas, probablemente porque no suponen una restricción de las calorías y no hacen que tengas hambre todo el tiempo.