Preparación:
Mezclamos los gránulos de kéfir con la leche entera en un tarro de cristal, lo tapamos y dejamos a temperatura ambiente durante 24 horas.
Lo colamos en un colador de plástico (metal no) y volvemos a obtener los gránulos del Kéfir para volver a repetir el proceso.
Le dejamos durante otras 24 horas (opcional) y ya está listo.
Los nódulos de kéfir son un cultivo simbiótico de bacterias y levaduras que fermentan la leche, produciendo una bebida rica en probióticos beneficiosos para la salud digestiva y el sistema inmunológico. Con el tiempo, estos gránulos se reproducirán, permitiéndote aumentar la producción o compartirlos con familiares y amigos.
Nota:
¡Buen provecho!