1989 World Tour
En mi nota anterior discutimos la primera mitad de la carrera de Swift: desde sus inicios de puro country a la mezcla de estilos y géneros que fue Red. Y así es como llegamos a 2014. En Agosto, Swift lanzó Shake It Off. ¿Hace falta que siquiera hable de Shake It Off? Todos escuchamos la canción, coescrita por el trío Swift-Martin-Shellback, hasta el cansancio. Estaba en todos lados: YouTube (el vídeo tiene casi tres mil millones de visitas), radio, fiestas, bailes de fin de año de cuarto grado… Su melodía es muy divertida y su letra es increíblemente pegadiza, todos nos acordamos del estribillo (I Shake It Off! I- I - I Shake It Off!).
Unos meses después, en Octubre, Swift lanzó 1989, su álbum más exitoso hasta la fecha. Coescrito en su mayor parte junto a Shellback y Martin, tiene sonidos inspirados en el synth pop de los años 80. Es su disco más cohesivo, sonoramente hablando, todas las canciones son del mismo género. No estoy diciendo con esto, sin embargo, que todas las canciones sean iguales, nada más alejado de la realidad.
Los temas más destacados de 1989 son, sin lugar a duda, Blank Space, Wildest Dreams y Style. La primera fue la canción más exitosa de toda la era, reemplazando a Shake it Off en el Número Uno del Hot 100 y marcando una tendencia que duró meses. Fue escrita como una respuesta a las críticas que recibía Swift por sus novios. Ella se pone en los zapatos de la persona que los medios decían que era: Una chica obsesionada con sus exes, posesiva, demasiado intensa, celosa… Tomó este concepto y lo exageró, burlándose de nuevo de personas que la criticaban sin razón.
1989 fue un éxito mundial absoluto, obteniendo números de ventas inconcebibles, y catapultando a Swift al estatus de verdadera superestrella. En 2014 y 2015 no pasaba una semana sin que ella apareciera en la tapa de alguna revista, sin que no hubiera algún artículo hablando de ella de alguna forma.
El álbum terminaría convirtiéndose en el álbum pop más premiado de todos los tiempos. Cosechó tres Grammys (incluyendo Álbum del Año), tres AMAs e incontables premios más.
Y aquí, cuando Swift estaba en su pico, es cuando todo colapsó. En 2016, Kanye West lanzó la canción Famous, que poseía los ahora infames versos: “I feel like me and Taylor might still have sex // Why? I made that bitch famous (Yo creo que Taylor y yo todavía podríamos tener sexo // ¿Por qué? Hice famosa a esa perra) West hace referencia al incidente de los VMAs de 2009, cuando West le quitó el micrófono a Swift de la mano y proclamó que no merecía su premio. Swift y su equipo criticaron la letra de la canción por el insulto y el mensaje misógino que contenía. En respuesta, Kim Kardashian, la esposa de West, publicó un video editado, en el que, supuestamente, Swift avala la letra de la canción. Esto era mentira. Swift aprobó “Yo creo que Taylor y yo todavía podríamos tener sexo” pero nunca fue informada de la segunda parte.
Los medios, sin embargo, ignoraron este pequeño detalle. Swift fue lapidada. Llamada una serpiente. Una traidora. Otra serie de escándalos le siguió: su ruptura con Calvin Harris, el breve romance con Tom Hiddleston… La tendencia número uno en Twitter por casi una semana fue #TaylorSwiftIsOverParty (Fiesta de Taylor Swift está acabada). Fue por esto que, en 2016, Taylor Swift desapareció.
La cantante se alejó de los medios. Del ojo público. Dejó de postear en sus redes sociales, dejó de aparecer en público, y se concentró en sí misma, en su nueva música y en su relación con su novio, Joe Alwyn.
El 24 de Agosto de 2017, Swift lanzó sorpresivamente Look What You Made Me Do, una canción que abrazaba la mala reputación que había obtenido, en la que prometía que el karma existe, y que West, Kardashian, y todos quienes le hicieron daño recibirían su merecido. La canción debutó una estética más oscura para Swift, usando una paleta de colores de negros, rojos y dorados, y tomando la serpiente, el insulto que Kardashian le había dedicado, como su símbolo personal. El single se catapultó al número uno del Hot 100, y el video musical, ampliamente considerado como uno de los mejores de la historia, acumula más de 1,1 mil millones de visitas.
En octubre de ese año, Swift lanzó reputation. El álbum habla sobre la relación de Swift y Alwyn, y cuenta las pruebas y tribulaciones que ella sufrió para encontrar verdadero amor en el medio de una mala reputación. A pesar de que, al principio, sufrió una recepción tibia por parte de los críticos (en gran parte gracias al single principal, que no es la mejor de las canciones), con el tiempo se lo está comenzando a apreciar cada vez más. Hoy en día, tres años después, muchos consideran a reputation un álbum conceptual, que cuenta la historia, mediante sus letras y melodías, de una época turbulenta en la vida de Swift y, a medida que van pasando las canciones, como consigue finalmente encontrar la paz.
reputation se aleja un poco del sonido de 1989, ya que toma inspiración de los géneros del trap y el rap, además de oscurecer bastante el pop de 1989. Las canciones más notables, donde se nota de nuevo la gran habilidad lírica de Swift, son, en mi opinión, Call It What You Want, Delicate, Dancing With Our Hands Tied, y, sobre todo Getaway Car.
Tras reputation vino el masivo reputation: Stadium Tour. La gira rompió el récord de mayor audiencia para una artista femenina en Norteamérica, y fue alabada por tanto fans como especialistas. Es una de las razones por la cual reputation es ahora más apreciado que hace tres años. Las canciones resuenan mucho más con uno en vivo que en su versión de estudio, y el espectáculo en sí es simplemente asombroso. El concierto fue filmado y lanzado en Netflix. Yo recomiendo que lo vean, porque, honestamente, es una experiencia indescriptible.
reputation: Stadium Tour
Fue en 2018 cuando Swift rompió su silencio político. Hasta ese momento, Swift se había rehusado a hacer cualquier tipo de comentario en temas políticos. Los conservadores estadounidenses creían que, debido a haber pasado gran parte de su infancia y adolescencia en Nashville, Tennessee, una zona bastante conservadora del país (además de por sus rasgos físicos: cabello rubio, piel blanca y ojos celestes), Swift compartía sus ideales. Resultó ser que nada más lejos de la verdad. Cuando ese año Swift alzó su voz para apoyar a un candidato demócrata en Tennessee y para criticar al Presidente Trump, muchos republicanos trataron a Swift de ignorante e idiota, pero sin contradecir los puntos que hacía…
Y en ese clima altamente político fue que Swift lanzó Lover, su séptimo álbum de estudio. Estuvo precedido por dos singles: ME!, en colaboración con Brendon Urie de Panic! At the Disco, un regreso al pop ligero y alegre de 1989, y You Need to Calm Down, un himno por los derechos de la comunidad LGBTQ+. Ambos singles fueron muy exitosos, con sendos Número 2 en el Hot 100.
A pesar de que, de nuevo, los singles son las canciones más débiles del disco, Lover es un álbum excelente. Si reputation fue una fría noche de invierno, Lover es una tarde estival. Con sonidos acústicos y, de nuevo, una lírica maestra. Las canciones más destacadas son Cruel Summer, Lover, Miss Americana & The Heartbreak Prince, Death By a Thousand Cuts y Afterglow.
Lover es un álbum tranquilo e íntimo, Swift abre una puerta a su vida y sus preocupaciones con las canciones. Nos deja entrever sus problemas personales, como el cáncer de su madre, su miedo frente a la situación política del mundo, y su amor por Alwyn.
Swift se convirtió verdaderamente en una activista durante Lover. Por los derechos de la comunidad LGBTQ+, con You Need To Calm Down y su ferviente apoyo al Acta de Igualdad. Una feminsita, como lo demostró con The Man. Y en un ícono de la defensa de los derechos de los artistas.
Unos meses antes de la concepción de Lover, Swift dejó la discográfica que había publicado todos sus discos hasta ese momento: Big Machine Records. Esto sucedió debido a la negativa por parte de la disquera de vender a Swift los masters de sus álbumes. Unos meses después, Big Machine, junto con todo el catálogo de la cantante, fue comprada por Scooter Braun. ¿Quién es Scooter Braun, me preguntás? Nada más ni nada menos que el mánager de Kanye West.
Swift, al enterarse de quién compró su música, prometió volver a grabar todos sus discos, a partir de Noviembre de 2020, para hacer inútil la compra de Braun.
En 2020, debido a la pandemia global, el Lover Fest, en promoción del álbum, no se hizo. Sin embargo, obtuvimos algo discutiblemente mejor: folklore, el octavo álbum de Swift.
folklore fue otro giro de 180° para ella. Abandonó completamente los sonidos pop de sus últimos tres álbumes, decantándose por un nuevo estilo indie-folk. También fue distinto debido a que fue un álbum sorpresa, su anuncio ocurrió menos de diez horas antes del lanzamiento.
folklore es, sin lugar a dudas, el disco mejor escrito de Swift. Ella, ahora, no sólo usa las canciones para hablar de su propia vida, sino que también cuenta historias, explora escenarios, fantasías y posibilidades. Las mejores canciones, en la humilde opinión de su servidor, son exile, hoax y the lakes. Nunca antes sus letras han sido tan fuertes, tan impactantes, tan hermosas…
cardigan, el single principal, fue de nuevo otro gran éxito para Swift, debutando en el número uno del Hot 100, y el álbum tiene, hasta ahora, siete semanas en el número 1 del Billboard Hot 100.
Volviendo a la pregunta del título: ¿Por qué Taylor Swift es una de las artistas más importantes del Siglo XXI? Porque sus canciones marcaron a millones de personas, porque su habilidad como escritora ha inspirado a incontables artistas a seguir sus pasos. Sólo por nombrar a algunos artistas que la nombran como una de sus mayores inspiraciones, tenemos a Ed Sheeran, Billie Eillish, Camila Cabello, entre muchos otros. El sonido de 1989 fue la base del pop de las segunda mitad de la década pasada. Álbum tras álbum, Swift sigue rompiendo récords, hoy en día está en la misma liga que los Beatles y Michael Jackson. ¿No me creen? Estos dos últimos son las únicas personas con más semanas en el número uno del Billboard 200 que ella.
¿Qué le depara ahora a Taylor Swift? No lo sabemos. Ella, con los años, se ha convertido en una persona muy privada, desde los grandes escándalos de 2016 apenas comparte cosas en las redes sociales, y poco y nada se sabe de su vida, fuera de lo que nos cuentan sus canciones. De algo podemos estar seguros, igual: su éxito no está ni cerca de apagarse.