Remedios Varo ilumina el MALBA
POR: RENA MEAÑOS
En febrero de 2020 llegaron desde México las obras de Remedios Varo. Lamentablemente para todes les fanatiques del arte, pocos días después de su apertura el MALBA estuvo obligado a cerrar sus puertas y estos “tesoros” quedaron escondidos.
Por suerte hace algunas semanas, lograron reabrir (con los protocolos de higiene correspondientes). El CENBA se puso el barbijo y fue a ver de que se trataba, pero lo que vimos supero arrasadoramente nuestras expectativas.
Un poco de contexto; Remedios Varo (1908 -1963) es una artista nacida y formada en España, participo del surrealismo catalán y francés, sin embargo, no es una artista exclusivamente surrealista. En 1941 huyendo de la ocupación nazi en París, se exilió a México donde terminó de desarrollar un estilo propio.
Su obra refleja todas estas particularidades y la exposición condimenta con una curaduría excelente con una distribución ingeniosa y unos textos brillantes; Victoria Giraudo y Carlos .A. Molina, curadores, disponen las obras y objetos de tal forma les espectadores podemos diferenciar dos “etapas”, ingresamos primero en la vida cotidiana de Varo, el mundo físico.
En este primer trayecto los retratos de amigos, bocetos, fotos de la artista en distintas épocas, textos escritos a mano describiendo experiencias y sensaciones y pertenencias como joyas, minerales, cigarros, una baraja española de cartas y otros objetos nos transportan de manera casi mágica. Y nos permiten experimentar lo que viene, sintiendo que acabamos de emigrar a México a principios de 1940 dejando todo atrás.
Al avanzar menos de un metro (respetando la distancia social, por supuesto) dejamos de estar en las calles de México para recorrer los caminos de la mente de Remedios, su imaginario y los productos de este. Giraudo y Molina, nuestros guías en este “tour” se encargaron de señalizar muy bien el camino, dividiendo las obras en distintas secciones.
Entre estas secciones, cada una presentada con un texto tan poético como explicativo, está “Bestiario” que describe su relación con la naturaleza, las criaturas fantásticas que habitan en la mente de cualquier persona con la cuota de locura indispensable para ser un buen artista y por supuesto su fanatismo por los felinos.
Entre sección y sección, salen a la luz joyitas como “Papilla Estelar” y sus respectivos ensayos y bocetos previos, incluso algunos cuentos en anotadores llenos de palabras, bocetos y probablemente… un poquito de magia.
La artista es maravillosa, la exposición es maravillosa y el museo es maravilloso, recomendamos completamente.
