Internet es mucho más que lo que encontramos a través de buscadores comunes como Google. Se estructura en diferentes capas, a menudo representadas como un iceberg.
Surface Web (Red Superficial)
Es la parte de Internet que la mayoría de los usuarios conoce, accesible sin restricciones y fácilmente rastreable por la dirección IP. Incluye páginas indexadas por buscadores y sitios públicos no indexados como redes sociales. Representa una fracción minúscula del total de datos en el ciberespacio, aunque su tamaño exacto es difícil de determinar, estimándose en miles de millones de páginas.
Deep Web (Web Profunda)
Constituye aproximadamente el 90% del contenido de Internet y no es accesible a través de motores de búsqueda estándar. Incluye contenido protegido por paywalls, archivos almacenados en la nube (ej., Dropbox, Google Drive), correos electrónicos, y bases de datos que requieren consultas o contraseñas (como campus virtuales). No es inherentemente ilegal, pero su anonimato la ha asociado con contenido ilícito. Se accede principalmente a través de navegadores especiales como TOR (The Onion Router) y se navega a través de directorios como The Hidden Wiki.
Dark Web (Web Oscura)
Es una pequeña fracción de la Deep Web (alrededor del 0.1% del total de la World Wide Web) que está intencionalmente oculta a los motores de búsqueda y usa direcciones IP enmascaradas. Solo se puede acceder a ella con aplicaciones específicas y navegadores especiales que se conectan a Darknets (redes superpuestas específicas como TOR o I2P). Los sitios de la Dark Web usan dominios particulares (.onion, .i2p) y a menudo albergan contenido ilegal debido a la falta de control y el anonimato que proporcionan. Aunque son parte de la Deep Web, las Darknets son las redes que alojan este contenido deliberadamente oculto.