8. El nacimiento del Arte Contemporáneo.

1. Un genio difícil de clasificar. Francisco de Goya (1746-1828).

Vamos a cerrar este bloque, como el anterior, dando unas pinceladas (nunca mejor dicho) sobre los estilos pictóricos de la época que hemos recorrido. A estas alturas no creo que haga falta repetir que no se trata de que intentes memorizar nombres, autores, obras, fechas, características..., sino de que aprendas a entender mejor el lenguaje pictórico y a comentar de modo personal lo que te sugiere.

Empezaremos comentando algunas cosas sobre un genio singular, el aragonés Francisco de Goya. Lo cierto es que por la época en que vivió debería haberse encuadrado en el estilo neoclásico o en el romántico, y algo tuvo de ambos, pero desarrolló una pintura tan personal que resulta difícil aplicarle etiquetas. Y no es casualidad que lo hayamos elegido para empezar este tema, porque algunos de los pintores que a fines del siglo XIX comenzaron a revolucionar la pintura admiraban a Goya e incluso se inspiraron en él en algunos de sus cuadros, como puedes comprobar en la imágenes que abren este apartado.

Hay algo que al terminar este tema debería llamarte la atención.

Autorretrato de Goya los 25 años (1771).Wikimedia Commons, Dominio Público.

Francisco de Goya y Lucientes nació en la localidad aragonesa de Fuendetodos (cerca de Zaragoza) el 30 de marzo de 1746. En 1763 el joven artista viajó a Madrid, donde hizo amistad con otro artista aragonés, Francisco Bayeu, pintor de la corte, con cuya hermana Josefa se casó en 1774. A él se debe que participara en encargos importantes para la basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza.

Viajó por Italia (Roma, Venecia, Génova...) y a su vuelta a España se instaló en Madrid y comenzó a trabajar para la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara. Los cartones que realizó desde esa fecha hasta 1792 fueron muy apreciados por la visión fresca y amable que ofrecían de la vida cotidiana española. Aunque sus pinturas para tapices pueden encuadrarse en el estilo neoclásico, ya desde el inicio empezó a imprimirles un toque personal, que le hizo destacar y le ganó un puesto como pintor de cámara de la familia real. A partir de ese momento Goya disfrutó de una posición privilegiada en la corte de Carlos IV, con numerosos encargos que incluyen los retratos oficiales del monarca y su familia.

Los retratos de los miembros de la familia real española, solos o en grupo, y de otros miembros de la Corte, han situado a Goya como uno de los grandes maestros de este género. ¿Qué tienen de particular estos retratos para que se les dé tanta importancia?

Tal vez lo que más puede destacarse es la capacidad de Goya para retratar el alma y la psicología de los personajes y para plasmar su propia opinión sobre ellos, pocas veces favorable, sin que los protagonistas lleguen a notarlo. En otros aspectos, como la composición de grupos, posturas, etc. se puede decir que Goya se inspiró en la tradición, ya que en la Corte podía ver y estudiar a conciencia los retratos de los grandes maestros de otras épocas, como Velázquez.

La familia de Carlos IV (1800). Observa que Goya se incluye a sí mismo pintando el cuadro, como Velázquez en Las Meninas.Wikimedia Commons, Dominio Público.

Aparte de su trabajo oficial en la Corte, Goya realizó trabajos más personales usando la técnica del grabado. En este tipo de obras es tal vez donde aflora con más libertad el genio del pintor y su personalísimo mundo interior, lleno de imaginación, amargura y crítica. Sus series de grabados Los Caprichos (realizada entre 1797 y 1799) y Los disparates (1816-1823), son una feroz sátira llena de ironía contra los defectos sociales y las supersticiones de la España de la época. Impactantes son también los grabados de Los desastres de la guerra, en los que Goya reflejó, como si de un reportero actual se tratara, escenas desgarradoras de la barbarie cometida por unos y otros durante la Guerra de Independencia contra las tropas francesas.

Grabado de Los desastres de la Guerra.Wikimedia Commons, Dominio Público.






El sueño de la razón. Perteneciente a Los Caprichos.Wikimedia Commons, Dominio Público