HIJA Y AMANTE DE ALEJANDRO VI PAPA :Lucrecia Borgia,
Lucrecia Borgia, en italiano Lucrezia Borgia (1480 -1519), la hija de Rodrigo Borgia, el poderoso valenciano del renacimiento que llego al papado de la Iglesia Católica con en nombre de Alejandro VI, su madre fue Vannozza Cattanei, uno de sus hermanos fue el notorio déspota Cesár Borgia. Está familia realizó impopulares maniobras políticas para permanecer en el poder, y fueron prisioneros de la corrupción sexual asociada a los papados renacentistas.
Su padre y su hermano le concertaron una serie de casamientos con hombres importantes y poderosos de la época, siempre manipulada por las ambiciones políticas. Lucrecia se desposó con Giovanni Sforza (Señor de Pésaro), Alfonso de Aragón (Duque de Bisceglie), y con Alfonso d’Este (Príncipe de Ferrara). Los rumores sobre Alfonso de Aragón hablaban de que era hijo ilegítimo del Rey de Nápoles y de que César Borgia pudo haberlo asesinado cuando su valor político empezó a eclipsarse.
Después de que Rodrigo Borgia fuera elegido papa, en 1493 casó a Lucrecia con Giovanni Sforza con el fin de obtener una poderosa alianza con esta familia milanesa. La boda fue un escándalo, pero no mucho más que otras celebraciones del Renacimiento
Cuando, la familia Borgia no tenía necesidad alguna de los Sforza, y la presencia de Giovanni en la corte papal era una molestia innecesaria, y el Papa necesitaba otras alianzas mucho más ventajosas, fue motivo por el que presuntamente se ordenó su asesinato. El hermano de Lucrecia, César, le informó de esto a su hermana, y ella advirtió a su marido quien huyó de Roma, es posible que el Papa Alejandro jamás ordenara este asesinato y no fue más que un complot realizado por César y Lucrecia con el fin de alejar de la Corte a un marido aburrido. Fuera como fuese, al Papa Alejandro le agradó la posibilidad de poder concertar otra boda para Lucrecia, pero antes de ello, tenían que librarse de Giovanni.
Alejandro pidió al tío de Giovanni, cardenal Ascanio Sforza, que persuadiese a Giovanni para que se anulara el matrimonio. Giovanni se negó y además acusó a Lucrecia de incesto con su padre y con su hermano. Dado que el matrimonio no había sido consumado, el Papa dijo que era un matrimonio no válido y ofreció a Giovanni la dote de Lucrecia si mostraba su acuerdo con la anulación. La familia Sforza amenazó a Giovanni con retirarle su protección si rehusaba la oferta de Alejandro. Al no tener otra elección, Giovanni Sforza, firmó ante testigos una confesión en al que admitía ser impotente, lo que equivalía a consentir la anulación de la boda.
Después de que Rodrigo fuera elegido papa, se inicia la fase de la vida de Lucrecia Borgia que más pábulo ha dado a su leyenda negra posterior:
Mientras se llevaba a cabo la separación de Giovanni Sforza, Lucrecia estuvo recluida en un monasterio y su única relación con el exterior era mediante mensajes que le enviaba su padre por medio de un tal Perotto. Justo antes de la boda con su siguiente marido, Alfonso de Aragón, y cuando tenia 17 años Lucrecia dio a luz un niño, al que los historiadores llamaron «el infante romano».
El Papa Alejandro VI, en 1501 emitió dos bulas: en la primera reconoció al niño como hijo de César y en la segunda, que se mantuvo secreta durante años, lo reconoció como hijo propio. Las bulas no mencionan a Lucrecia, al poco tiempo, Perotto dijo que el hijo era de la relación que había mantenido con Lucrecia.
En 1502 César, en apoyo de esta paternidad, nombró Duque de Camerino al niño. Camerino era una de las conquistas de César, de aquí que heredara este ducado el hijo mayor del Duque de Romagna. Al poco de la muerte de Alejandro VI, Giovanni fue a vivir con Lucrecia en Ferrara donde se le reconoció como hermanastro.
Las interpretaciones son mucho más variadas. La creencia más difundida es que el niño, hijo de Lucrecia, era el fruto de su incestuosa relación con César, y que Perotto, dada la debilidad que sentía por ella, dijo que el niño era suyo. Durante el embarazo, Lucrecia estuvo, como se ha dicho, encerrada en un convento lejos de Roma, de modo que nada se pudo saber sobre su estado. Lucrecia estaba muy preocupada por la posibilidad que se supiera que estaba embarazada y que esta noticia llegara a Roma, ya que entonces todos sabrían que era hijo de su hermano César. César en esa época era cardenal de la Santa Iglesia y —si hubiera tenido una relación ilícita con su hermana mientras ella estaba casada con Giovanni— habría sido muy difícil ocultarlo, especialmente a su padre, el Papa. La leyenda del incesto o incestos tanto con su hermano como con su padre, en gran medida surge de esta época, sin que nada pueda asegurarse.
En el primer encuentro que hubo entre Alfonso de Aragón y César Borgia, antes de la boda con aquél, Cesar quedó muy bien impresionado por él y su aspecto, además la boda con él suponía una alianza muy beneficiosa para los Borgia
Con el tiempo dicha alianza se volvió políticamente adversa, entre otros motivos por las intrigas maquiavélicas de los Borgia. César manda matar a Alfonso, quien fue atacado una noche de julio de 1500 quedando herido. En venganza los hombres de Alfonso disparan a Cesar con sus arcos cuando caminaba por el jardín. César nuevamente jura venganza. Lucrecia sabedora de esto, no se separa día y noche del lecho de Alfonso hasta que, engañada por su hermano, sale del cuarto, lo que sirve a un hombre de confianza de Cesar para asesinar a Alfonso. El matrimonio tuvo un niño, Rodrigo, que moriría en 1512, con 13 años de edad.
La leyenda negra, acusa a César del asesinato, por celos. Puesto que Lucrecia estaba no deseaba relaciones amorosas con su hermano. Tras la boda, habría dejado de prestar atención a su hermano. César cayó enfermo por sifilis, y le quedaron muchas y llagas en la cara no mejoraban. Estas heridas lo acomplejaron y decidió llevar máscaras y a vestir de negro. El hecho de perder el amor de su hermana y lo desagradable de su aspecto hizo que aún odiara más a Alfonso de Aragón, que era muy atractivo de modo que lleno de celos, los hombres de César Borgia atacaron a Alfonso dándole muerte.
Al año de la muerte de Alfonso, Lucrecia pasa a ser la administradora de la Iglesia y del Vaticano, lo que fue muy criticado acusándola de excesiva juventud e inexperiencia. Aunque era por su mala fama y cuando se piensa en casarla nuevamente con un vástago de la familia de los duques de Ferrara de nombre Alfonso la familia muestra su más enérgica negativa. No obstante, los Borgia insisten y con su dinero, influencias y poder, obtienen finalmente su consentimiento.
A la muerte de su suegro Ercole (Hércules) d’Este, Lucrecia pasa a ser duquesa de Ferrara. Durante su estancia en la ciudad se hace protectora de las bellas artes y tiene una relación platónica con el poeta Il Bembo, se dedica a cuidar a sus hijos abnegadamente, Lucrecia intentó llevar a la Corte de Ferrara al hijo que tuvo con Alfonso de Aragón, pero su marido se niega, teniendo que vivir con Isabel de Aragón.
En 1519 y tras el parto de su quinto hijo muere de fiebre puerperal a los 39 años, en sus últimos años había sido la digna esposa del Duque de Ferrara. Sus contemporáneos vieron en ella a una mujer culta, inteligente y bella, amante del arte, aunque utilizada por la ambición desmedida de su padre y hermano, en un medio muy critico con las mujeres y muy liberad con los hombres.
Los Borgia conservaron toda su vida el uso del valenciano con sus familiares. Su padre era de Xátiva, el primer Borgia el papa Calixto III tío abuelo de Lucrecia, había nacido en Torreta de Canals, cerca de Xátiva.
Lucrecia se ha hecho más famosa por estas leyendas que por su vida, leyendas que como se ha dicho fueron, posiblemente, más bien causadas por la licenciosa vida de su padre y su hermano César.
Se decía que tenía un anillo hueco, rellenado con veneno que utilizaba para envenenar las bebidas.
Las relaciones incestuosas tanto con su hermano como con su padre fueron simultáneas con ambos.
Posiblemente el motivo que dio nacimiento al rumor fuera la relación tan cariñosa entre ellos tres, que siempre mantuvieron.
Se conocen muchos rumores de la vida de Lucrecia, existen historias de ella y su familia , aunque nada de forma cierta se le puede atribuir , en Roma incluso se sospechaba que tuvo participación activa en los crímenes de su padre y hermano.